Susténtame en tu palabra

Te he manifestado mis caminos, y me has respondido.

Enséñame tus estatutos. Hazme entender el camino de tus mandamientos, para que medite en tus maravillas. Se deshace mi alma de ansiedad; susténtame según tu palabra.

  Moody (un pastor del siglo pasado) dijo: “Muchos hombres creen que la Biblia es un libro atrasado, que ya pasó a la historia.

Dicen que estaba bien para los tiempos remotos, y que contiene algunas páginas históricas de interés, pero que no sirve para hoy; que vivimos en el siglo de las luces, y hemos adelantado tanto que los hombres pueden andar perfectamente bien sin la Biblia”.

Lo mismo sería decir que el sol, que ha brillado tanto tiempo, es ya tan viejo que es una cosa atrasada; o que cocinemos siempre con carbón y leña en vez de utilizar GLP, y que dejemos de usar el correo tradicional para solamente usar “email” que es lo moderno.

La Biblia es un libro que está vivo, que sus párrafos tienen un valor trascendental en la humanidad.

Es un manantial de vida, es la Biblia. En ella encontramos todo el consejo de Dios para el hombre.

La Biblia se adapta a todos los tiempo, no importa la época en la que el hombre pueda vivir, ella será como faro de luz al caminar para todo el que busque a Dios.

La palabra de Dios es alimento espiritual para nuestra alma, es la fuente inagotable, es más dulce que la miel.

Tu puedes deleitarte en sus mandamientos, no son gravosos.

Te animo a que puedas leer este libro llamado inagotable que es la Biblia, no es un libro que está atrasado, es el libro más actualizado, pues él hablará a tu alma en el momento que necesites que Dios te hable y que tú puedas decir como muchos hombres y mujeres… “susténtame según tu palabra”.