Si bien es cierto que el dominicano Rafael Soriano firmó su contrato de tres años y US$35 millones en el invierno 2010-11, para ser preparador de Mariano Rivera en los Yanquis de Nueva York, también es verdad que anhelaba la adrenalina de salvar los juegos.
Creo que todos saben lo que puedo hacer en el noveno, dijo Soriano. A veces no es tan fácil. Sé lo que tengo, y todo el mundo sabe lo que tengo, de lo que soy capaz. Ya quiero hacerlo.»
Soriano se quedó con el puesto de cerrador, luego que los Yanquis perdieran por lesiones a Rivera y a David Robertson.