Los nódulos tiroideos, como tumores  sólidos, quísticos y mixtos, que en la mayoría de los casos son benignos y asintomáticos se presentan en el 10 por ciento de la población afectada y causan sensación de estorbo al tragar, cuando son muy grandes pueden ser visibles.

El tratamiento de los nódulos depende de cada caso y la mayoría de las veces únicamente requiere seguimiento endocrinológico con medicamentos orales, en su defecto, tratamiento quirúrgico cuando así lo amerite el caso.

El cáncer de tiroides es la causa más frecuente de tumores  endocrinológicos y existe una tendencia al alza mundial de la enfermedad.

En el 95 por ciento  de los casos, el primer signo es una masa en la glándula tiroidea que se identifica en la exploración física y  sonografía de cuello. Pocas veces presenta síntomas importantes, pero puede manifestarse por ronquera, dolor al tragar y molestias en el cuello.

Las personas que padecen cáncer de tiroides deben someterse a una cirugía y requieren de un seguimiento especial. Como se elimina totalmente la glándula el paciente desarrolla hipotiroidismo total, razón por la cual deberá recibir hormona tiroidea de por vida en dosis reguladas.