*Por Luis Manuel Tejada

En este artículo expongo cual es el escenario, en este momento, en la carrera hacia la presidencia de los Estados Unidos en las elecciones del próximo año, 2024. Con una pregunta capciosa que todos nos haríamos: ¿Volverá Donald Trump a ser presidente? De ser así, estaríamos frente a un hecho sin precedentes en la historia norteamericana.

A continuación presento el escenario actual según encuestadoras, lo cual uso como parte del análisis. En los primeros 3 años de su primer periodo presidencial, el presidente Joe Biden aparece siendo el único presidente con el nivel más bajo de popularidad de los últimos 75 años, haciendo la comparación con los últimos 13 presidentes, desde el año 1945 a la fecha (Barack Obama, George W. Bush, Bill Clinton, George H. Bush, Ronald Reagan, Jimmy Carter, Gerald Ford, Richard Nixon, Lyndon B. Johnson, John F. Kennedy, Dwight D. Eisenhower y Harry Truman), incluyendo la comparación con el periodo de Donald Trump (JB:37.7% y DT: 42%), según las encuestas realizadas por las encuestadoras YouGov, Rasmussen Reports, Ipsos, Big Village y TIPP Insights.

Los resultados de estas encuestas resaltan un nivel de aceptación o aprobación promedio de un 16% a favor de Donald Trump por encima de Joe Biden. Este escenario predice que la ruta de la re-elección de Biden se torna oscura, sobre todo, por el rechazo popular de su apoyo, político y económico, al genocidio que la ultraderecha israelí ejecuta contra el pueblo palestino; puedo agregar también, al juego de la doble moral mientras condena la invasión de  Rusia a Ucrania; doble moral que la población joven norteamericana no parece tolerar.

Es importante resaltar que, aunque estos números o porcentajes beneficien a Trump frente a Biden, tampoco les dan los créditos de credibilidad para ocupar la presidencia a ninguno de los dos a nivel nacional. Los números, según las mismas encuestas, expresan un alto porcentaje de rechazo y bajo nivel de aceptación para ocupar la presidencia (Donald Trump: rechazo 52.6%, aceptación 42.5% y Joe Biden: rechazo 55.4%, aceptación 37.37%). Sin embargo, ese rechazo a Trump no se refleja en la intención del voto para las primarias internas del Partido Republicano, pues las encuestas lo colocan con 60% por frente a los demás aspirantes, los cuales no logran alcanzar el 13%; mientras Joe Biden acumula un 67% para las primarias demócratas.

Entonces, a dónde es que está la traba: Si comparamos los niveles de popularidad mencionados, asumiendo que ambos serían los candidatos oficiales de sus partidos, Joe Biden, ya de hecho no tendría muy llano el camino de la re-elección y peor, pues, parece que este rechazo a ambos, encuentra una propuesta que inclina a muchos votantes a votar diferente. Entra en la carrera una tercera opción competitiva.

Es casi seguro que el 26% de aceptación del candidato Robert F. Kennedy, quien también se postula de manera independiente a la presidencia para el 2024, estaría afectando al candidato demócrata Joe Biden, pues Donald Trump cuenta con una base de seguidores conservadores sólidos, los cuales nunca se inclinarían por un descendiente de los Kennedy.

En este momento, el juego está trancado para Biden, que además, refleja un estado físico no adecuado para gobernar 4 años más, dejando abiertas las puertas de Washington al expresidente Trump, quien acumula el mayor records de acusaciones en casos criminales de la historia. Si los demócratas no entienden estos números, entonces estarían pavimentando una vía sin obstáculos para acomodar de nuevo una habitación a Trump en la Casa Blanca.

El Partido Demócrata esta compelido a pedirle al presidente Biden que renuncie a sus aspiraciones para, con tiempo, buscar un candidato competente o de lo contrario se expondría a sufrir una derrota vergonzosa. Con tiempo el mal tiene cura, aunque que haya que amputar y ambos son cuerpo y cabeza de ese mal.