LIMA, Perú.-República Dominicana participó en el diálogo de los jefes de negociación sobre cambio climático que se realizó en esta capital con el objetivo de propiciar un espacio reflexivo y fortalecer la posición regional de América Latina y el Caribe, dado que este es un año clave para que la comunidad internacional avance en la definición de un acuerdo en 2015, entraría en vigor en 2020, para alcanzar reducciones significativas de emisiones de gases de efecto invernadero.
El objetivo de la reunión fue propiciar un debate creativo y práctico sobre la forma de abordar el desarrollo del nuevo acuerdo, en particular la aplicación de los principios de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC) y la manera de estructurar y desarrollar los elementos principales del acuerdo propuesto después del resultado de Varsovia, en 2013.
Perú será sede en diciembre de este año, de la vigésima Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático y de la décima reunión de la Partes del Protocolo de Kyoto, único instrumento jurídicamente vinculante de la Convención
El evento fue organizado por las cancillerías de Chile, Brasil y Perú, este último país anfitrión, con el apoyo técnico de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
En ese escenario, el vicepresidente ejecutivo del Consejo Nacional para el Cambio Climático y el Mecanismo de Desarrollo Limpio, Omar Ramírez Tejada, presentó en nombre de República Dominicana sus consideraciones sobre cómo llegar a un acuerdo en Lima y París, y describió lo que considera deben ser los componentes del acuerdo, consistente en adaptación, con pérdidas y daños, mitigación con mayor ambición, financiamiento de largo plazo y a través del fondo verde, transferencia tecnológica, educación y como debe ser el régimen climático post 2020.
Explicó que “dicha decisión no puede ser el fruto de un acuerdo delos bloques de países G-8 y G-20, sino del G-194 como resultado del consenso de la totalidad de los países que representan el multilateralismo, para hacer del nuevo acuerdo la genuina expresión de la universalidad de países que participan en la construcción del nuevo régimen climático mundial”.
Agregó que el acuerdo deberá estar basado en la ciencia y en los resultados del quinto informe del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático(IPCC por su sigla en inglés), ser amplio en su alcance, ambicioso en las metas de reducción de emisiones globales, jurídicamente vinculante y equitativo en la aplicación del principio de las responsabilidades comunes pero diferenciadas, reconociendo la participación de los países desarrollados en las emisiones históricas de forma proporcional”.
Los organizadores del diálogo invitaron al doctor Ricardo Lagos, expresidente de Chile, quién ofreció una conferencia magistral a los delegados sobre sus experiencias como exenviado especial de Ban Ki-moon, secretario general de la Naciones Unidas, para el Cambio Climático del 2007 al 2009 cuando terminó la conferencia de las Partes de Copenhague.
En la actividad participaron delegados de 28 países de la región: Antigua y Barbuda, Argentina, Bahamas, Barbados, Belice, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, Ecuador, El Salvador, Honduras, Guatemala, Guyana, Jamaica, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Saint Kitts y Nevis, San Vicente y Las Granadinas, Surinam, Trinidad y Tobago, Uruguay, Venezuela y República Dominicana.