El Día 
SANTO DOMINGO.-Víctima de la delincuencia urbana, un fenómeno en pleno crecimiento en la isla, Roodline Lindor, con tan solo 20 años, no pudo realizar el sueño de terminar una carrera universitaria, al encontrar la muerte el 12 de Julio del 2011, en el sector conocido como Hipódromo en las afueras de Santo Domingo. Un hecho que conmocionó a la comunidad estudiantil y la sociedad haitianas, dejando en el dolor a sus familiares y relacionados.
Sin invertir en campañas publicitarias, desde principios de los años 80, el continuo crecimiento de la presencia estudiantil haitiana, ha convertido hoy a la República Dominicana, en el mayor destino académico para universitarios del país vecino y hermano. Lo cual, repercute positivamente, por un lado, en la construcción de lazos para un mejor entendimiento entre futuros dirigentes de ambos países. Por otro lado, en los ingresos de los centros académicos y el fortalecimiento de su imagen institucional a nivel internacional. Asimismo, en varios sectores económicos, principalmente, de servicios.
Hay 12 mil estudiantes haitianos en RD
Se estiman actualmente alrededor de 12,000, los universitarios haitianos matriculados en centros de altos estudios dominicanos, quienes, para su manutención, reciben millones de dólares en remesas desde Haití, Norteamérica y Europa.
Paradójicamente, no existe, por lo menos de manera formal, un programa de orientación para estos jóvenes que llegan a un país extranjero sin grandes experiencias en el camino de la vida.
La muerte violenta de Roodline Lindor puso al desnudo esa situación por haber sido perpetrada por dos desconocidos, actualmente en espera de ser enjuiciados, que aprovecharon de su inocencia e ingenuidad ofreciéndose para encontrar un alojamiento para quien se convertiría en su víctima.
A un año de esa dolorosa desaparición, mientras los procedimientos legales siguen su curso para evitar la impunidad que frecuentemente marcan estos casos, la Fundación Zile (FZ), ante la constatación de falta de acompañamiento oficial, llama a las autoridades de ambos países a tomar las iniciativas oportunas para responder a las necesidades de estos jóvenes y asistirles adecuadamente.
En este contexto y el marco de la aplicación del memorándum de entendimiento y cooperación técnico entre los dos países en los campos de la educación superior, ciencia y tecnología, firmado en ocasión del relanzamiento de los trabajos de la comisión mixta bilateral el pasado mes de marzo de este año en la capital dominicana, la FZ propone:
– Crear un grupo de trabajo interinstitucional con representantes de las entidades gubernamentales dominicanas concernidas, de la embajada de Haití, de las universidades, de las asociaciones de estudiantes, y de las ONG especializadas en la cuestión migratoria, con el fin de concertar criterios alrededor del accionar oficial en relación a este tema y ponderar la asistencia o acompañamiento que necesitan los estudiantes para su plena integración a la sociedad dominicana durante su estancia en el país;
– Incentivar la organización estudiantil de los jóvenes haitianos en todas las universidades del país para multiplicar las redes de comunicación e intercambios entre ellos y los estudiantes dominicanos;
– Promover con la presencia de los estudiantes haitianos en la República Dominicana programas de intercambios con universidades en Haití, incorporando a jóvenes dominicanos para el continuo fortalecimiento de los lazos entre los dos pueblos;
Por último, la FZ aboga por una solución urgente de la administración dominicana saliente a la situación de los estudiantes haitianos que no han sido aún beneficiados de los compromisos asumidos por el Jefe de Estado en un encuentro en Santiago en enero del año 2006 para la regularización de su situación migratoria de acuerdo a su estatus académico. Los mismos están siendo afectados por una disposición administrativa de la Dirección General de Migración que los penaliza con la suma de RD$ 800 por cada mes de estadía.
La Fundación Zile
Creada en el 2005 tras actos de violencia entre haitianos y dominicanos en Hatillo Palma, la Fundación Zile es una organización binacional integrada por personalidades dominicanas y haitianas cuya misión es la promoción y preservación de la paz entre los dos países de la isla. Su junta directiva está presidida por el obispo emérito de la Iglesia Episcopal (anglicana), reverendísimo Telésforo A Isaac. En tanto que el reverendo Edwin Paraison es el director ejecutivo.
