Santo Domingo.-La rápida y efectiva atención del Sistema Nacional de Seguridad Ciudadana 9-1-1, que puso en marcha el Gobierno, pende de la “suerte” que tengan las unidades de emergencia de dar con el paradero de quien esté en apuro y solicite auxilio.
A juzgar por las repeticiones que registran las numeraciones de las viviendas, lo ilocalizables que se vuelven las casas, muchas ubicadas en peatonales o callejones, las cuales sobrepasan hasta 30 unidades en la parte trasera de una calle, difícultará la atención a los munícipes.
A ese fenómeno se suman los ilegibles y dislocados rótulos que identifican los nombres de calles, así como la señalización, que en ocasiones llevan al conductor a cualquier lugar, menos al que se dirige.
Durante un recorrido de EL DÍA, los reporteros detectaron hasta tres casas con el mismo número, como ocurre en la Doctor Tejada Florentino de Villa Consuelo; señales obstruidas por cables o árboles, como sucede en la avenida Ortega y Gasset con Arturo Logroño en el sector La Fe, y otros como en la Máximo Gómez (específicamente frente al Teatro Nacional), que ubican el Palacio Nacional en el sector La Esperilla y en otros extraños casos.
Entidades activan plan
Ángel Segura, director de Tránsito y Movilidad Urbana del Ayuntamiento del Distrito Nacional, informó que trabajan con el Sistema 9-1-1 en una Mesa Técnica que agrupa Obras Públicas, Amet, OMSA y la Opret.
Igual trabajan las juntas de vecinos. Como parte de la iniciativa la ciudad será dividida en cuatro cuadrantes, retomarán la identificación de las vías principales con nombre y número.
“Por ejemplo, de este a oeste el eje principal será la Jhon F. Kennedy; de norte a sur será la Máximo Gómez y a partir de ahí enumeraremos las vías para mejorar la fluidez”, precisó Segura.
Adelantó que colocarán mil señales nuevas verticales.
