Navidad, espacio para reflexionar y sanar

Navidad, espacio para reflexionar y sanar

Navidad, espacio para reflexionar y sanar

Esta época es tiempo de reflexión y de unidad familiar.

La Navidad es, para muchos, una época de luces, abrazos y celebraciones. Sin embargo, no todos experimentan estas fechas con felicidad.

En el corazón de esta temporada, cuando todo parece girar en torno a la unión y la alegría, hay quienes cargan con emociones difíciles: la tristeza de un duelo reciente, el vacío de una ruptura matrimonial o la ausencia de un ser querido que está lejos.

Estas “trizas emocionales”, como yo las llamo, se sienten más profundas en un momento donde todo a nuestro alrededor nos invita a estar felices. Este contraste puede hacer que las heridas sean aún más visibles y dolorosas.

Las redes sociales, las reuniones familiares y las tradiciones navideñas pueden convertirse en recordatorios constantes de lo que falta, de lo que se ha perdido o de aquello que anhelamos, pero no tenemos.

En consulta, es común escuchar frases como: “No puedo celebrar la Navidad desde que murió mi madre”, “Siento que mi familia ya no es la misma después del divorcio” o “La distancia de mis seres queridos hace que estas fechas pierdan su sentido”.

Estos sentimientos son válidos, humanos y merecen ser reconocidos. ¿Cómo enfrentar esta realidad emocional en Navidad?

1. Permítete sentir: No te obligues a estar alegre porque “es Navidad”. Reconocer y aceptar tus emociones es el primer paso para procesarlas.

Andrea Belén

La tristeza, el enojo o la nostalgia también son parte de nuestra experiencia humana.
2. Crea nuevas tradiciones: Si las tradiciones pasadas te resultan dolorosas, intenta crear otras que te hagan sentir bien. Tal vez una cena sencilla con amigos cercanos o una actividad que disfrutes a solas.

3. Busca apoyo emocional: Hablar con un terapeuta o con alguien de confianza puede ayudarte a poner en perspectiva tus emociones y encontrar maneras de afrontarlas. A veces, compartir lo que sentimos alivia parte de la carga.

4. Haz algo significativo: Ayudar a otros puede dar un nuevo sentido a esta época, como ofrecer tiempo en actividades comunitarias o realizar un pequeño gesto para alguien que también esté pasando un momento difícil.
La Navidad no tiene que ser perfecta, ni mucho menos igual para todos.

Para quienes cargan con una pérdida o una ruptura, estas fechas pueden ser una oportunidad para honrar esos sentimientos y encontrar formas de sanar.

Como terapeuta, mi invitación es esta: no te compares con la felicidad aparente de los demás. Cada camino emocional es único, y está bien vivir estas fechas a tu manera.

Recordemos que, más allá de las luces y los regalos, la Navidad puede ser un momento para aprender, reconectar y fortalecer nuestro interior.

La autora es Psicóloga Clínica, Terapeuta Sexual y de Familia y CEO del Centro Calma Alma.

Recomendación

— Conecta contigo
Aprovecha estas fechas para reflexionar sobre lo que tienes, más allá de lo que te falta. Practicar la gratitud, aunque sea en pequeños aspectos, puede ayudarte a encontrar momentos de paz: ‘conectar con uno mismo’.

*Por Andrea Belén



El Día

Periódico independiente.