HIGÜEY.- Un agresivo distribuidor de narcóticos trató de evitar, cuchillo en mano, ser arrestado por la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) después de arrebatarle un niño de tres años a su madre para luego parapetarse en una vivienda, amenazando con degollarlo si las autoridades insistían en detenerlo.

Rodríguez Espinosa, de 26 años, era perseguido por agentes de la DNCD y al verse acorralado arrebató el pequeño a la joven Yolani Urbáez.

El incidente se produjo en la calle 3ra, próximo a un local donde funciona un centro de juego de billar conocido como “El Silencio”, precisamente donde el detenido operaba un punto de venta de estupefacientes. En la acción resultó lesionado el capitán Ángel Ernesto Ramírez Lantigua.

“Un agente estaba a punto de darle alcance a este distribuidor de drogas y en esa circunstancia pasó por el lado de la joven madre y le arrebató su bebé de menos de tres años de edad, causando angustia entre los vecinos. Por fortuna los oficiales pudieron convencerlo para que no cometiera una locura con el niño”, dijo la DNCD.

La madre estaba en el patio de su vivienda, a donde penetró Rodríguez Espinosa de manera violenta para apoderarse del infante para luego, cuchillo en mano, refugiarse en un rincón de la casa amenazando con cortarle la garganta al niño. De todos modos fue arrestado, sin que el niño sufriera lesión alguna.

A Espinosa le fueron ocupadas cerca de 11 gramos de cocaína. La DNCD recibió la información de que ese hombre se dedicaba a vender estupefacientes al lado del ‘Billar el Silencio’, por lo que le fue montada una vigilancia y cuando se determinó que el dato era real se procedió a l arresto en flagrante delito.