Multitud grita libertad en Siria

Siria.-El Gobierno sirio prometió ayer estudiar la posibilidad de levantar las rígidas restricciones sobre las libertades políticas y civiles en un intento por poner fin a una semana de manifestaciones en las que, según los participantes, las fuerzas de seguridad han matado a decenas de personas.
Las promesas, sin embargo, difícilmente satisfarían a los manifestantes en la ciudad sureña de Daraa, donde miles reclaman libertades y desafían la represión en marchas fúnebres.
La asesora presidencial Buthaina Shaaban culpó de las manifestaciones a agitadores foráneos, pero dijo a la prensa en Damasco que el gobierno del presidente Bashar Assad estudiaba levantar el estado de emergencia, vigente desde 1963, que permite encarcelar a la gente sin juicio ni orden judicial.
Añadió que el Gobierno redactaba una ley que permitiría la existencia de partidos aparte del gobernante Baath y levantaría las restricciones sobre la prensa. Además, aumentaría los sueldos de los funcionarios públicos, a los que otorgaría seguro de salud y buscaría mejores medios para combatir la corrupción.
Shaaban dijo que Assad había ordenado a las fuerzas de seguridad no abrir fuego en Daraa incluso si las atacaban, pero que quizá se cometieron errores.
La mayoría de los negocios estaban cerrados, las calles casi desiertas y la Policía antiterrorista montó retenes en toda la ciudad.
Las protestas se han convertido en un gran desafío para el gobierno.