
Cartagena, Colombia. – La asesora en comunicación y doctoranda Massiel Reyes Lecont advirtió que la comunicación interna debe ser vista como un capital político estratégico para garantizar la gobernabilidad de los Estados y no como un accesorio.
Durante su participación en la Cumbre Mundial de Comunicación Política donde expuso la conferencia titulada “La voz que no se ve: liderazgo político y comunicación interna como capital estratégico”, Reyes sostuvo que más allá de campañas y discursos dirigidos a la ciudadanía, la fortaleza de un liderazgo político descansa en la confianza que logra construir con sus propios equipos de trabajo.
“Un liderazgo claro, transparente y coherente hacia adentro genera alineación, eficacia en la gestión pública y credibilidad hacia la ciudadanía”, afirmó.
Beneficios de la comunicación interna
La especialista alertó que una comunicación débil en el ámbito interno puede derivar en fragmentación, desmotivación y desgaste institucional, factores que socavan la efectividad de las políticas públicas y deterioran la legitimidad de los gobiernos.
Por el contrario, destacó que gestionar la comunicación interna de forma estratégica asegura mayor cohesión organizacional, rapidez en la ejecución de decisiones, incremento de la legitimidad política y capacidad de prevenir crisis.
La voz que no se ve
Reyes definió la comunicación interna como “la voz que no se ve”, al ser un proceso poco visible en la esfera pública, pero determinante para la sostenibilidad de las instituciones.
“La verdadera fortaleza de un liderazgo no se mide únicamente en la opinión pública, sino en la confianza silenciosa de sus propios equipos”, puntualizó.
La conferencia de Reyes se inscribió en los debates de la Cumbre que reunió a estrategas, consultores, periodistas y dirigentes políticos de distintos países de América Latina, centrada en los desafíos de la comunicación en tiempos de alta volatilidad política y social.