Santiago.-Hace ya 40 años que la merenguera María Díaz irrumpió en la música típica como una exponente con características propias, tanto en su forma de tocar el acordeón como en ser una de las mayores vendedoras de discos de este género musical.

Al hablar de las cuatro décadas se remonta a sus años de infancia en su natal Nagua, donde aprendió a conocer la música al escuchar a los icónicos Tatico Henríquez y Bartolo Alvarado, porque solo se escuchaban esos merengueros en la zona. “era lo que llegaba en el campo y yo conocí el merengue típico por ellos. No había de quien aprender”.
Pero los años parece que se han detenido en torno a su físico, pues se conserva muy juvenil.

Es la del “medio” de 13 hermanos que procrearon los esposos Pablo Díaz, un acordeonista, y Dolores Martínez (doña Lolita); solo ella y Adolfo se inclinaron por la música de manera profesional.

Cuando decidió aprender a tocar el instrumento de origen alemán fue en su comunidad con su padre, a los 12 años de edad, y siguió perfeccionándose al residir en la ciudad de Nueva York.

Blanca María Díaz es músico, compositora y arreglista, y es la única en tener registradas 38 composiciones en Sodaie y Onda de sus 18 producciones (de 12 temas en su mayoría de su creación); discografía que respalda su dilatado repertorio de merengues derechos o tradicionales, pambiches y modernos.

La merenguera confiesa que recibe los beneficios como autora de letras a través de las referidas asociaciones que protegen a los compositores. “Yo he recibido varios regalos y soy la única con esa cantidad registrada”.
Es conocida en el ruedo artístico como “La Reina”, mote que le puso el también músico Juan Robles “El viejo puro”; le llamó así porque vaticinó que sería destacada en la música denominada ‘perico ripiao’.

La artista autodidacta se mantiene tocando todo el año en la nación dominicana, pero también en los EE. UU. y Europa, donde goza de gran aceptación del público quisqueyano y del extranjero.

La intérprete de “La torera” se considera una artista sencilla, pero innovadora, tanto en lo musical como en la vestimenta, y hasta posee un micrófono inalámbrico personal.

‘La Reina’, al arribar a los 40 años de aporte a la música típica dominicana, entiende que su gran legado ha sido la permanencia como la segunda mujer, el registro de sus canciones en los organismos que regulan el arte y la venta de discos, que en su mayoría son composiciones de su autoría.

“Pero, sobre todo, hacer un trabajo con respeto al público y sin escándalos”, refirió la destacada artista.

Trayectoria

— Celebración
En su aniversario musical la artista pretende celebrarlo en grande y por ello se encuentra en conversaciones con expertos para hacerlo por todo lo alto, con un espectáculo y una producción discográfica.

*Por FIor D ‘Aliza Taveras