Una frase bíblica, “Nolite dare sanctum margaritas vestras ante porcos”, aconseja no echarle perlas (margaritas en latín) a los cerdos.

La ancestral sabiduría del dicho resume que hay cosas demasiadas buenas o bellas que ciertos seres no pueden apreciar.

Nada que ver con dramas de intimidad personal que deben respetarse, aun cuando su hijastra Nicole, con foto abrazada con su papá Leonel Fernández, posteara “las mujeres de tu vida siempre a tu lado, apoyándote”.

Ha sido una bomba política la declaración de la vicepresidenta Margarita Cedeño (ya no pone “de Fernández”) de que “sería un desperdicio volver a ser primera dama”, que ella “no echa para atrás ni para coger impulso” y que el PLD debe dar paso como candidato presidencial “a una nueva generación, que realmente puede ganar en primera vuelta”.

¿No lo haría Leonel? Margarita propone “que se tome en cuenta mi trabajo, mi motivación, me encanta el trabajo que hago para que se pueda aprovechar en favor de los más necesitados del pueblo dominicano”.

Se espesa el caldo…