SANTO DOMINGO.-El empresario de Santiago y el colombiano que supuestamente fueron secuestrados hace seis días llegaron ayer por sus propios medios hasta su vivienda, tras alegadamente ser liberados por sus captores, quienes exigían US$5 millones.

Epifanio Arias y el extranjero Luis Eduardo Méndez (Paisa), quienes alegadamente fueron secuestrados el día 8 del presente mes, se pusieron en contacto con las autoridades al llegar a la residencia del criollo, en la comunidad Gurabo, de Santiago.

Arias y Méndez fueron conducidos hasta el Departamento Antisecuestros de la Policía en Santo Domingo para ser interrogados, luego de ser despachados del hospital regional José María Cabral y Báez, donde les realizaron pruebas para determinar su estado de salud.

La uniformada investiga si la aparición de los secuestrados se trató de una liberación voluntaria o si sus familiares pagaron el rescate exigido por captores.

El pasado jueves, Yaneyva Marcelino Álvarez, esposa del empresario, denunció que su pareja había sido secuestrada junto al extranjero cuando se dirigían a visitar un amigo común.

Trascendió que un amigo de la víctima, identificado como Molina, figura en el reporte policial como la persona a quien Arias habría llamado para ofrecerle los detalles del alegado secuestro.

Arias, quien residió varios años en los Estados Unidos, es propietario de la plaza comercial Moli, ubicada en la avenida Circunvalación Sur, en la entrada del sector Cienfuegos, en Santiago de los Caballeros.

Policía descartó rumor

El pasado domingo, el vocero de la Policía, coronel Frank Félix Durán, informó que los investigadores antisecuestro descartaron que un cartel colombiano, que supuestamente opera en el país, hubiera perpetrado el secuestro, como había trascendido.

Caso similar

El caso se parece al ocurrido el pasado mes con Kairon Antonio Peralta Arias, quien supuestamente fue secuestrado en Haití, y luego se presentó en la frontera tras alegadamente huir de sus captores.

Las pruebas médicas y psicológicas realizadas a Peralta Arias, así como las pruebas recolectadas por la Policía y la versión de las autoridades del vecino país evidenciaron que este no mostró ningún tipo de lesión y que el hecho no tuvo coherencia.

El joven explicó que fue contactado por una mujer de nacionalidad haitiana a través de otro chofer y que se reunió con esta en Dajabón, donde le entregó 7,500 pesos para gestionar el alquiler del vehículo que sería utilizado para transportar un grupo de misioneros. Agregó que durante su cautiverio no fue maltratado físicamente por sus captores.
—Ofrecerán detalles
El vocero de la Dirección Cibao Central de la Policía Nacional, coronel Juan Guzmán Badía, informó que las investigaciones avanzan y tan pronto concluyan darán a conocer todos los resultados.