Santo Domingo.- La moringa conocida como moringa oleifera, es un árbol de rápido crecimiento que pertenece a la familia moringaceae y su origen proviene de las regiones subtropicales del sur de Asia.
Esta planta se ha cultivado durante siglos en países como India, Filipinas, África y América Central, donde se aprovechan no solo sus hojas, sino también sus semillas, vainas, flores y raíces por sus propiedades medicinales y nutritivas.
Esté árbol puede alcanzar una altura de hasta 10 metros y tiene hojas pequeñas y ovales que son particularmente ricas en nutrientes esenciales.
Beneficios Nutricionales y Medicinales
La moringa es conocida por su excepcional perfil nutricional.
Vitamina A: Importante para la salud ocular y la función inmunológica.
Vitamina C: Necesaria para el sistema inmunológico y la salud de la piel.
Vitamina E: Un antioxidante que protege las células del daño.
Vitaminas del grupo B: Cruciales para el metabolismo energético y la función cerebral.
Además, las hojas de moringa contienen una notable cantidad de minerales como hierro, calcio, potasio y zinc, todos ellos esenciales para diversas funciones corporales.
También el té de moringa ayuda a reducir el aumento de peso, reduce el colesterol y la presión arterial.
Uno de los aspectos más destacados de la moringa es su alta concentración de proteínas de calidad.
Las hojas de moringa contienen todos los aminoácidos esenciales, lo que las convierte en una excelente fuente de proteínas completa, especialmente beneficiosa para vegetarianos y veganos.
Propiedades Medicinales
Los beneficios para la salud de la moringa van más allá de su perfil nutricional.
Reducir la inflamación: Gracias a su contenido de isotiocianatos.
Combatir los radicales libres: Debido a su alto contenido de antioxidantes.
Regular el azúcar en sangre: Beneficioso para personas con diabetes tipo 2.
Apoyar la salud cardiovascular: Reduciendo el colesterol y mejorando la función arterial.
Fortalecer el sistema inmunológico: Gracias a su contenido de vitaminas y minerales clave.
Estas propiedades hacen de la moringa un aliado potencial en la lucha contra diversas enfermedades crónicas y condiciones de salud.
Usos y Aplicaciones
La versatilidad de la moringa permite su uso en diversas formas. Las hojas frescas se pueden consumir directamente en ensaladas o jugos, mientras que las hojas secas se utilizan comúnmente en forma de polvo, que se puede agregar a batidos, sopas o infusiones.
Las semillas de moringa, por otro lado, se utilizan para producir aceite que es beneficioso tanto para uso culinario como cosmético.
Además de su uso alimentario, la moringa también se está explorando como una solución sostenible para problemas ambientales y de salud global.
Debido a su capacidad para crecer en condiciones áridas y pobres en nutrientes, la moringa podría desempeñar un papel crucial en la seguridad alimentaria y la nutrición en muchas partes del mundo.
Lea también: 10 enfermedades por falta de vitamina D