La hipertensión pulmonar es una enfermedad multifactorial

La hipertensión pulmonar es una enfermedad multifactorial

La hipertensión pulmonar es una enfermedad multifactorial

La hipertensión pulmonar es una enfermedad en la cual la presión en las arterias pulmonares está por encima de lo normal, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Mónica Rosario, Coordinadora del Servicio de Cardiopatía Congénitas en el Adulto de los Centros de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemedicina (Cedimat), explica que esta afecta la circulación de los pulmones y el lado derecho del corazón, el cual tiene que bombear de forma más enérgica para suplir la sangre a ese nivel.

La cardióloga señala que las causas más comunes de esta condición son las afecciones del lado izquierdo del corazón, ya sea por daño de sus válvulas o por causas crónicas de aumento de la presión a este nivel, que se transmite retrógradamente al pulmón.

También están los problemas respiratorios crónicos, como embolias al pulmón y enfermedades mixtas como las del tejido conectivo (lupus, esclerodermia, entre otras) o infecciosas, el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) y algunas parasitosis.

De igual modo, las cardiopatías congénitas, una que no haya sido tratada y/o otra en la que haya quedado con defectos residuales, donde un incremento en la carga de presión y volumen conlleva a esta complicación. De ser esta la causa, se estaría ante una hipertensión arterial pulmonar, la cual se maneja diferente a otros tipos de hipertensión pulmonar y en centros expertos.

La profesional considera que en el inicio del desarrollo de esta complicación si es factible debe corregirse el defecto, pero una vez las resistencias del pulmón están muy elevadas, es imposible realizar corrección y con el paso del tiempo el flujo se invierte de derecha a izquierda y se desarrolla el síndrome de Eisenmenger (una afección que resulta de la circulación anormal de sangre causada por un defecto cardiaco), el cuadro final que implica afectación de varios sistemas, incrementando las posibilidades de otras complicaciones y muerte.

La médica lamenta que en República Dominicana hay muchas personas con cardiópatas que aún no le han sido diagnosticadas y un número aún mayor las que ya han desarrollado hipertensión pulmonar, sin tener tratamiento apropiado.

Asimismo, la galena resalta que existe un grupo especial de pacientes en los que aparece hipertensión pulmonar, estos son aquellos que a pesar de corregirse el defecto continúan con presiones elevadas y otros que a pesar de corrección en la niñez desarrollan hipertensión a largo plazo, estos tienen un peor pronóstico, ya que son muy similares a los que tienen hipertensión pulmonar primaria, un grupo donde la mortalidad sucede de manera más rápida.

Rosario puntualiza que por estas razones todos los pacientes con cardiopatía congénita deben tener seguimiento a largo plazo, vigilante de la posible aparición de la hipertensión.

Y un grupo muy especial son los pacientes con circulación de Fontan, donde la circulación hacia el pulmón depende de que no exista elevación de las presiones en este circuito, por lo que la aparición de una mínima elevación de las presiones pulmonares puede alterar drásticamente el funcionamiento y causar descompensación grave en el paciente.

Manejo hipertensión
La cardióloga explica que en la actualidad se cuenta con terapias dirigidas a disminuir las presiones pulmonares de forma farmacológica, brindando mejor calidad de vida a los pacientes, en caso de que no puedan ser corregidos quirúrgicamente o por cateterismo.

La médica cita que hay que mantener constantemente verificada la posible afectación de otros órganos, la función hepática y la capacidad de hacer sus actividades que posea el paciente, para determinar cuándo hay que incrementar la agresividad del manejo.

Es importante tomar en consideración ciertos estudios al momento de evaluar a pacientes con defectos del corazón, como son los estudios de imágenes, tales como el ecocardiograma y en muchos casos también se debe hacer uso del cateterismo cardiaco.

La experta dice que esos exámenes también resultan útiles para saber cómo va la respuesta al tratamiento empleado. Además, existen pruebas funcionales, como la caminata de los seis minutos y las pruebas de función cardiopulmonar, que valoran, tanto la capacidad funcional, como otros parámetros del estado del paciente que indican la morbilidad y pronóstico a largo plazo.

La especialista plantea que es de suma importancia el diagnóstico adecuado, el referimiento a tiempo y la ruta terapéutica oportuna, tanto para corrección cuando sea posible del defecto de base, como para el manejo farmacológico que permita prolongar la vida de esos pacientes, desde la sospecha clínica, por el examen físico del médico de atención primaria, pediatra, internista o cardiólogo, la solicitud de estudios complementarios, de primera línea el ecocardiograma y por último el referimiento al experto en el área para manejo puntual de la misma.

Qué pueden hacer

— Consejo
La especialista dijo que se debe saber que actividades de la vida pueden realizar estos pacientes y cuáles no son recomendadas, como consumo de alcohol, embarazo, entre otras.

Recomendación
Si usted es un paciente que tiene alguna enfermedad congénita del corazón, es importante que acuda a un especialista en esta condición, para recibir una evaluación exhaustiva y de esta manera poder descartarla o tratarla.



Noticias Relacionadas