La cartografía desempeñó un papel crucial en el descubrimiento de América. Antes del viaje de Cristóbal Colón en 1492, la mayoría de los mapas europeos no representaban con precisión las tierras más allá del Atlántico. Sin embargo, el interés creciente por las exploraciones marítimas y la búsqueda de nuevas rutas para llegar a Asia impulsaron el desarrollo de técnicas cartográficas más avanzadas.
En general, las cartas y mapas de la época estaban basados en la antigua creencia de que la Tierra era plana. Sin embargo, a medida que los exploradores y los geógrafos ampliaban sus conocimientos y experiencias, aparecieron nuevas teorías sobre la forma y el tamaño del mundo.
Relatos de viajeros
En el siglo XV, los conocimientos cartográficos comenzaron a mejorar gracias a los avances en la tecnología y a la recopilación de información geográfica. Los cartógrafos europeos se basaban en diferentes fuentes de información, como los relatos de viajeros, las observaciones astronómicas y los mapas elaborados por culturas antiguas, como los romanos y los árabes.
Entre los instrumentos claves utilizados se encontraban el astrolabio, para determinar la posición y altura de las estrellas sobre el cielo; la brújula, utilizada para determinar la dirección cardinal de manera precisa; el cuadrante, que mide los ángulos en astronomía y navegación. Estos instrumentos ayudaron a los navegantes a fijar su posición y trazar rutas más exactas en los mapas.
Uno de los mapas más influyentes fue el Mapamundi de Fra Mauro, un cartógrafo veneciano del siglo XV. Elaborado en 1450, combinaba información de diversas fuentes y reflejaba los conocimientos geográficos de la época. Aunque contenía errores, como la representación incorrecta de la forma de África, fue una fuente importante para los navegantes.
Navegar hacia el oeste
Cristóbal Colón, quien buscaba una ruta marítima para llegar a Asia navegando hacia el oeste, también empleó mapas e información cartográfica. Se cree que estudió varios mapas, incluido el de Ptolomeo, un antiguo astrónomo y geógrafo griego que sugería que la tierra era redonda. Colón elaboró su propia teoría basada en estos mapas y en sus cálculos, convencido de que podía alcanzar las costas del citado continente navegando en dirección oeste.
Sin embargo, los mapas utilizados por Colón y otros exploradores de la época estaban lejos de ser exactos. La falta de conocimiento sobre la verdadera extensión del océano Atlántico y la existencia de un continente desconocido en el camino llevaron a sorpresas y descubrimientos inesperados.
Después de América
A medida que los viajes y las exploraciones continuaron en América, los cartógrafos comenzaron a mejorar sus mapas gradualmente. Los exploradores, geógrafos y cartógrafos posteriores, como Américo Vespucio, Martin Waldseemüller y Gerardus Mercator, aportaron nuevos conocimientos y técnicas que permitieron ir refinando las representaciones de las tierras descubiertas.
Juan de la Cosa y Martin Waldseemüller, entre otros, hicieron uso de la información recopilada en estos viajes para crear mapas más precisos de América. El famoso mapamundi de Waldseemüller, conocido como el Mapa de 1507, fue el primero en mostrar claramente el continente americano.
El descubrimiento de América también llevó a la creación de una nueva rama de la cartografía: la cartografía náutica. Los exploradores y navegantes necesitaban mapas más detallados y precisos para navegar por los océanos y explorar las nuevas tierras.
Con posterioridad al descubrimiento de América, la cartografía se vio influenciada por los intereses de las potencias europeas. Los mapas se convirtieron en herramientas importantes para establecer reclamaciones territoriales y planificar expediciones coloniales. Los cartógrafos representaban a menudo las nuevas tierras conquistadas como extensiones de esas propias potencias, ignorando las culturas y sociedades autóctonas.
Unos mapas imperfectos
Loremas A medida que se realizaban más exploraciones y se obtenía mayor información sobre América, los mapas se fueron perfeccionando y actualizando. Los cartógrafos comenzaron a representar con mayor precisión la topografía y las características geográficas del continente. Surgieron mapas cada vez más detallados y exactos a medida que se realizaban expediciones y se cartografiaban regiones específicas.
En resumen, la cartografía fue una herramienta fundamental que permitió a los navegantes europeos planificar sus viajes y exploraciones. Aunque los mapas de la época no eran completamente precisos, proporcionaron una base para la expansión del conocimiento geográfico y abrieron el camino para futuras exploraciones y la creación de mapas más precisos de América y el mundo.
AUTOR: ALTHUSSER JEREZ C.
Enc. División de Cartoteca