Santo Domingo.-Considerado como uno de los principales pulmones de la ciudad de Santo Domingo, el Jardín Botánico Nacional Doctor Rafael María Moscoso es uno de los pocos lugares que permiten a toda la familia disfrutar de la naturaleza al mismo tiempo que se educa e informa.
Las áreas del Jardín Japonés, el Rosal, las plantas acuáticas, las palmas, las orquídeas, el Androdeum, la laguna del Palmar, el Patio Español, el pabellón de Canasta, la Casa de Té y la Catedral Bambú son solo una muestra de los lugares que ubican a este lugar como uno de los preferidos por los habitantes de Santo Domingo.
Con una extensión de terreno de dos millones de metros cuadrados, entre áreas verdes, pabellones y senderos, en El Botánico, como cariñosamente es llamado, el público puede disfrutar de la armonía y la tranquilidad que le ofrece este importante pulmón verde de Santo Domingo.
De acuerdo a su director, Ricardo García, pese a ser una institución relativamente joven, ha hecho grandes aportes a la flora dominicana con el descubrimientos de nuevas especies para la Botánica.
A lo largo de su existencia, explica García, la institución ha formado a los mejores investigadores en el área de la Botánica, Biología y la Agroforestria. Por los departamentos de Botánica, Educación Ambiental y Horticultura han pasado profesionales de Haití, México, Alemania, Cuba, Puerto Rico, Estados Unidos, así como de las universidades de país, UASD, UNPHU, PUCMM, Utesa, Feliz Adams, Une, Isa y Loyola, entre otras.
Seleccionado entre los diez jardines más completos del mundo, está anclado en el sector Gala de los Jardines del Norte, entre las avenidas Los Próceres, Argentina y República de Colombia.
Su director afirma que cuentan con una intensa y abundante biodiversidad, con especies nativas, endémicas y exóticas únicas de la isla Española.
Más concurridos
Uno de los lugares más concurridos es el de los pabellones de Orquídeas, donde se cultivan, exhiben, estudian y conservan estas plántulas, alojado en una extensión de terrenos de 1,100 metros.
Otro lugar muy frecuentado es el pabellón de Helechos, que tiene más de doscientos especies nativas y endémicas, espacio que sirve de inspiración a artistas del pincel y la poesía por la paz que da su cascada.
García señala que el jardín fu creado para la familia.