Si te preguntara qué es lo que te inspira cada día. ¿Qué me responderías? Creo que es algo que pocas veces pensamos o analizamos, pero que forma parte esencial de nuestro quehacer diario hasta el punto de ser en muchas ocasiones el motor que nos impulsa.

Cuando hablo de inspiración, me refiero a cualquier cosa, persona, elemento, acto… que llegue a nosotros para hacer que seamos nuestra mejor versión, sin que suene a tópico.

Nos de ese estímulo, si lo queremos llamar así, que nos otorgue la sabiduría perfecta para tomar las mejores decisiones.

Hay veces incluso que nos conduce a extremos, a retarnos, a dar lo mejor y la milla extra; otras veces nos detiene, nos hace repacacitar sobre algo, ver una vertiente que no habíamos pensado y podemos llegar a la solución que buscábamos. Y también la inspiración simplemente nos desbloquea, hace que abramos nuestra mente a todo lo que nos rodea y sepamos apreciarlo.

Hablaba de tomar las mejores decisiones. Y para mí estas siempre son aquellas que nos permiten avanzar, aunque debamos soltar muchas cosas en el camino.

Y qué mejor forma que tener cerca a esas personas que sepan inspirarnos para lograr que cada paso que demos en el camino sea hacia delante.

Por lo tanto, en este momento toma unos minutos para analizar quién o qué tienes en tu vida que te inspira cada día a llegar a esas decisiones que necesitas para dar los siguientes pasos, en cada faceta de tu vida, y aunque sea mentalmente dales las gracias porque te aseguro que no son tan frecuentes y hay que conservarlas cerca.

Y, además, trata de ser inspiración para aquellas personas que quieres para que el círculo se complete y la inspiración siga logrando su objetivo. Unir y avanzar, siempre.