El Gobierno británico estudia planes de contingencia en caso de un fuerte aumento de la inmigración de Grecia y otros países comunitarios por un eventual colapso del euro.
En unas declaraciones publicadas ayer en el diario The Daily Telegraph, la ministra de Interior, Theresa May, dijo ayer que se trabaja para hacer frente a un gran movimiento de personas en Europa si se produce una caída de la eurozona.
Las autoridades británicas estiman que muchos ciudadanos comunitarios traten de venir a trabajar al Reino Unido ante la difícil situación económica en sus países. La ministra no especificó el tipo de medidas que se pueden aplicar para controlar la migración de la región.