Santo Domingo.- Este lunes, a las 9:00 de la mañana, el Primer Juzgado de Instrucción de San Cristóbal inicia la primera audiencia de la fase preliminar en el caso de la explosión en el antiguo mercado municipal, ocurrida el 14 de agosto de 2023, que dejó un saldo trágico de 38 personas fallecidas, decenas de heridos y múltiples desaparecidos.
En esta etapa del proceso, los únicos imputados son los propietarios de la empresa Vidal Plast, señalada como responsable del lugar donde se originó el siniestro.
En septiembre, el Ministerio Público presentó una acusación formal y solicitó la apertura a juicio contra los acusados, quienes enfrentan cargos por la explosión en la fábrica de plásticos en San Cristóbal, que también provocó la destrucción de nueve edificios y afectaciones en diversas viviendas.
La acusación fue presentada en el Segundo Juzgado de la Instrucción del Distrito Judicial de San Cristóbal contra los propietarios de la fábrica, Edward Armando Vidal Garrido, Maribel Sandoval Almánzar, Mercedes Altagracia Vidal, y la empresa Vidal Plast SRL.
La explosión, cuyo impacto fue tan fuerte que generó ondas expansivas por la ciudad, se atribuye a prácticas inadecuadas en el manejo y almacenamiento de materiales inflamables en un espacio cerrado, lo que, según la acusación, condujo a la acumulación de gases peligrosos como el peróxido orgánico almacenado por años en el lugar.
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El Ministerio Público argumenta que la negligencia de los acusados, manifestada en el manejo inseguro de productos plásticos, sumado a su falta de cumplimiento de las normas de seguridad industrial, ambiental y de salud, resultó en la explosión ocurrida el 14 de agosto de 2023 a las 3:10 p.m. en la intersección de las calles Padre Ayala y Francisco J. Peynado, en el antiguo mercado de San Cristóbal.
El expediente también señala que las señales de riesgo ya eran evidentes desde el 18 de marzo de 2023, cuando, durante trabajos de herrería en la oficina de la empresa, una chispa provocó una reacción química que generó humo denso y calor, causando quemaduras a un trabajador.
En esa ocasión, miembros del Cuerpo de Bomberos de San Cristóbal concluyeron que la reacción fue ocasionada por una sustancia química y no por un incendio eléctrico.
El informe de bomberos indica que el responsable de la explosión fue el químico Autofina-Luporox A 70S (Peróxido Orgánico 5.2), utilizado en la industria de plásticos y caucho para la fabricación de polímeros. Este producto, señala la acusación, potencializaba el material plástico, haciéndolo más efectivo para la producción de la empresa.
La acusación se apoya en 128 pruebas, incluyendo testimonios, documentos, peritajes y evidencia audiovisual, en un caso que fue declarado complejo y para el cual se impusieron medidas de coerción por un año a los imputados el pasado 5 de septiembre.
El Ministerio Público acusa a los implicados de violar el artículo 319 del Código Penal, el artículo 153, numeral 2, de la Ley General de Salud 42-01, y los artículos 175, numeral 7, 176, 183 y 187 de la Ley 64-00 sobre Medioambiente y Recursos Naturales.