Tegucigalpa.- Desde ayer no hay quién mande en Honduras, al menos desde la Casa Presidencial, a pesar de tener dos presidentes, el derrocado Manuel Zelaya, y el de facto, Roberto Micheletti, en un insólito caso que se enmarca en la crisis política que vive el país centroamericano desde el golpe del 28 de junio.
Honduras amaneció ayer con dos presidentes, pero ninguno en el poder por el retiro temporal de Micheletti, que delegó su responsabilidad en el Consejo de Ministros hasta que se celebren las elecciones el próximo domingo y llegue el día 2.
A pesar de ello, el presidente de facto desde el golpe de Estado contra Zelaya ya se mantiene en alerta permanente como para actuar de inmediato si es necesario, dijo el martes el ministro de la Presidencia, Rafael Pineda.
El señor presidente ha oficializado su decisión de retirarse de la actividad pública desde el miércoles (ayer) y hasta el 2 de diciembre, dijo anoche Pineda.Una doble posición Inicialmente, el presidente Obama condenó el derrocamiento y dijo que EE. UU. no reconocería ninguna elección que se realizara bajo un gobierno instalado por un golpe. Sin embargo ahora favorece una salida con estos comicios.