Una paciente vino a consulta porque no entendía si su familia estaba maldita o sólo tenía mala suerte. Por alguna razón las mujeres de su sistema sufren violencia de género. Ella lo había visto desde pequeña, lo vivió en primera persona y más tarde vio a sus hijas vivirlo.

Cuando vino a mí, trajo consigo un pedazo de papel donde había anotado la línea materna donde reconoció algunas de las mujeres de su clan de víctimas de violencia familiar.

Ella no conocía sobre el genograma (“representación gráfica para registrar información sobre estructura y/o composición de una familia [genograma estructural] y las relaciones y/o funcionalidad entre sus miembros [genograma relacional], de por lo menos tres generaciones”). Sin embargo, gracias a esa reflexión gráfica fue más fácil y rápido que ella pudiera comprender cómo lealtades ciegas repetían esa historia familiar.

Tal como dice la definición, el genograma es un gráfico, puede ser dibujado utilizando como base el árbol familiar; en este caso agregas las informaciones que estás buscando.

Mi paciente buscó otras mujeres en otras generaciones que vivieron violencia doméstica, pero puedes buscar cualquier otra situación que necesite ser mirada en tu sistema: desamor, infidelidad, enfermedades, dinero, etc.
El genograma es utilizado en escenarios médicos, psicológicos, terapéuticos, coaching y cualquier otra área de acompañamiento.

El dibujo empieza contigo y el hecho que se repite en tu familia, que no te permite avanzar a una vida mejor, más saludable, alegre, etcétera.

Trabaja en un papel grande, utiliza lápiz por si necesitas borrar. Arriba de ti y tus hermanos agrega a tus padres y sus hermanos, arriba de ellos agrega a tus abuelos y sus hermanos.