Kabul.-El número de soldados extranjeros muertos en Afganistán en 2010, que ya era el año más letal desde el inicio del conflicto en 2001, superó la barra de los 700 y muestra la intensificación de un conflicto cada vez más impopular en los países de la coalición.
Al menos 702 soldados de las fuerzas lideradas por Estados Unidos -incluyendo los contingentes de la ISAF (Fuerza Internacional de Asistencia y Seguridad) al mando de la OTAN- han muerto desde el 1 de enero (en promedio 2 por día), según informó ayer el sitio independiente icasualties.org.
El último de ellos perdió la vida ayer tras la explosión de una bomba de fabricación casera, anunció la ISAF, sin dar más detalles.
Esta cifra supera en un tercio al balance de 2009, que con 521 soldados muertos había sido ya, por mucho, el año más sangriento para las tropas internacionales, confrontadas desde hace tres años a una considerable intensificación de la insurrección de los islamistas talibanes.
La mayoría de los muertos son soldados estadounidenses, que constituyen aproximadamente las dos terceras partes de los 140,000 hombres de la coalición. El ejército de Estados Unidos ha perdido 493 hombres en Afganistán este año, según icasualties.org, que también señala que desde finales de 2001 un total de 1,440 soldados estadounidenses han perdido la vida y 9,200 han resultado heridos en Afganistán.
Desde 2001, las tropas de la coalición han perdido 2,271 efectivos, según el sitio web, que no precisa el número total de soldados heridos.