La creciente producción de soja en los Estados Unidos y Brasil, los principales productores, lleva los inventarios globales a un récord y hace bajar los precios, que Goldman Sachs Group Inc. pronostica caerán al nivel más bajo desde 2010.
Las reservas crecerán 16 por ciento, a 72 millones de toneladas, para septiembre de 2014, el mayor aumento en cuatro años, según el promedio de las estimaciones de 17 analistas que recopiló Bloomberg News. Goldman dice que los futuros que se negocian en la Bolsa de Chicago bajarán 18 por ciento, a 10,50 dólares por bushel en 12 meses.
Precios que promediaban los más altos de la historia en 2012 llevaron a los agricultores a sembrar más, y la producción sumada de Brasil, los Estados Unidos, Argentina y Paraguay, los principales exportadores, se encamina a un récord.
Los productores también han tenido cosechas récord de trigo y maíz, lo que hizo bajar los precios globales de los alimentos durante cinco meses, el período más prolongado desde 2009, e impulsó las ganancias de compradores como Tyson Foods Inc., la mayor procesadora de carne de los Estados Unidos.
“Este año habrá grandes reservas, tanto en el plano local como en el internacional”, dijo Jeff Hainline, presidente de Advance Trading Inc. en Bloomington, Illinois, que compra y vende granos desde 1977. “Los precios récord de la soja proporcionaron un incentivo para el cultivo de más oleaginosas.
A menos que el dólar se derrumbe o que este año haya un problema meteorológico en América del Sur, los precios bajarán poco a poco”.