Santo Domingo.-En una jornada marcada por la cumbre de Jamaica sobre la crisis de Haití, el secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, anunció ayer en Kingston que su país va a aumentar su ayuda a la misión multinacional que está previsto se despliegue en Haití a 300 millones de dólares.
En una rueda de prensa tras la reunión de alto nivel convocada por la Comunidad del Caribe (Caricom) sobre Haití, en la que insistió en que, debido a la escalada de la violencia en el país caribeño, esa misión multinacional es “más importante que nunca”.
El Gobierno de Estados Unidos había decidido previamente aportar dos partidas de 100 millones de dólares cada una, procedentes del Departamento de Estado y del de Defensa, y ahora va a doblar la segunda.
En declaraciones al final del encuentro se dieron seguridades de que han avanzado en la vía de una solución a la crisis como se presenta en estos momentos, pero ninguno de los líderes presentes dio detalles. No lo hizo Blinken ni ningún miembro del Caricom.
Punto muerto
El despliegue de mil policías kenianos que liderarían la misión multinacional autorizada por la ONU para atajar la crisis de seguridad en Haití sigue en punto muerto, pese a la creciente presión internacional.
Ningún movimiento se ha registrado desde que Kenia y Haití firmaron el 1 de marzo un acuerdo bilateral solicitado por los tribunales del país africano para permitir la movilización del contingente de agentes kenianos al frente de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MMAS) en Haití.
Aquel día, el presidente de Kenia, William Ruto, y el primer ministro haitiano, Ariel Henry, presenciaron la firma del acuerdo en una ceremonia en la sede de la Presidencia keniana en Nairobi.
Aumento de la violencia
La violencia en la capital haitiana, Puerto Príncipe, ha aumentado significativamente desde que el pasado 28 de febrero se supo que Henry se comprometió a celebrar elecciones antes de finales de agosto de 2025, una fecha lejana si se considera que el primer ministro debió concluir su mandato el 7 de febrero.
Caricom
La Comunidad del Caribe (Caricom) y Estados Unidos se mostraron optimistas con la reunión de alto nivel sobre Haití celebrada ayer en Jamaica, y aseguraron que han logrado avances hacia una transición política en ese país.
“Estamos progresando”, afirmó el primer ministro de Jamaica, Andrew Holness, en una rueda de prensa en Kingston junto al presidente de turno de Caricom y mandatario de Guyana, Irfaan Ali, y el secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken.
Ali dijo ser muy optimista y sentirse lleno de confianza, mientras que Blinken habló de que las conversaciones se están moviendo en una dirección positiva.
En Puerto Rico
El primer ministro haitiano, Ariel Henry, no participó en la reunión de Jamaica convocada por la Comunidad del Caribe (Caricom) para tratar de hallar una solución a la crisis en Haití, y permanece en Puerto Rico, de donde está supuesto a salir tan pronto le sea posible.
Posición de RD
El Gobierno dominicano, a través del Ministerio de Relaciones Exteriores, precisó que fue invitado a la reunión de Caricom, pero consideró no conveniente su participación en la misma, debido a que dada la historia y vecindad de isla compartida, no puede ni debe involucrarse en decisiones internas que pertenecen exclusivamente al pueblo haitiano.
Medidas
—1— Salida
Las embajadas y representaciones diplomáticas en Haití están tomando medidas ante la escalada de la violencia.
—2— Alerta
La congresista en Florida de origen haitiano Sheila Cherfilus-McCormick alertó de los peligros para la seguridad de Estados Unidos que los pandilleros logren hacerse con el poder en Haití.
“Después no se quejen”, dice Abinader
Protección. El presidente Luis Abinader expresó que él esta haciendo lo que le toca, proteger a República Dominicana.
Sin embargo, precisó que a pesar de los contantes llamados de ayuda “si la comunidad internacional no actúa, nosotros vamos a seguir haciendo nuestras funciones, para que después no se quejen de las acciones que vamos a tener que hacer”.
Relató que hace apenas unos cinco meses estuvo en Naciones Unidas reiterando el llamado para ir en auxilio de la vecina nación, y a la fecha no ha habido respuesta.
“Dijimos que Haití estaba al borde del abismo. Se nos dijo tanto a nivel internacional y local que estábamos exagerando. Y desgraciadamente, con las circunstancias que están pasando quedamos corto”, describió.