Jarabacoa.- Aquí en esta ciudad, “donde siempre hay primavera”, además del agradable clima que le caracteriza, está el monumento natural salto de Jimenoa, a unos nueve kilómetros del centro de la población, un lugar para vivir una hermosa e inolvidable aventura.

Para llegar hasta esta bella cascada de unos 40 metros de altura, los visitantes atraviesan por un sendero aéreo hecho en madera y atado con fuertes cables, desde donde se puede apreciar la belleza impuesta por la naturaleza en toda su dimensión.

Edwar Infante, administrador del parque  de unos 17.43 kilómetros cuadrados y una de  las cascadas más altas del Caribe, afirma que los paisajes que adornan este lugar son muy exclusivos.

“Los turistas  que llegan son variados, pero mensualmente se estiman en más de dos mil, el 80 por ciento extranjero y el resto   criollos”, dijo.

Indicó  que la ubicación está entre Jarabacoa y Constanza, específicamente por Piedra Blanca.

En esta reserva, que representa una área de amortiguamiento de la Reserva Ciéntifica Ebano Verde, se encuentran especies nativas y endémicas, como pinos y bosques mixtos. Allí se encuentra la hidroeléctica bautizada con el mismo nombre, Jimenoa,   que abastece  parte de la energía que requiere Santo Domingo.