
Santo Domingo. – El presidente Luis Abinader sostuvo un nuevo encuentro con el secretario de Estado de los Estados Unidos, Marco Rubio, en el que abordaron importantes temas para la relaciones bilaterales entre ambos países, como la seguridad regional y la crisis haitiana, con énfasis en reforzar la misión de apoyo internacional para hacer frente a la inseguridad y la violencia.
La reunión celebrada en Nueva York, en el marco de la 80.ª Asamblea General de las Naciones Unidas, también incluyó conversaciones sobre la próxima Cumbre de las Américas, que se celebrará en diciembre en Punta Cana.
“Tuvimos una productiva reunión con el presidente Luis Abinader”, subrayó Rubio en un mensaje colgado en sus redes sociales, donde además, valoró las alianzas de colaboración entre Estados Unidos y República Dominicana.
En un comunicado del Departamento de Estado, el jefe de la diplomacia estadounidense también destacó la colaboración entre ambos países para desmantelar el tráfico ilícito de armas de fuego y drogas.
Esa fue la tercera reunión en el año entre Abinader y Rubio. La primera ocurrió en enero durante la visita del secretario de Estado a Santo Domingo, y la segunda en mayo, pero en Washington, donde ambos conversaron sobre la crisis haitiana y otros temas de interés.
El tema haitiano
El presidente de Kenia, William Ruto, informó recientemente que la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MSS) en Haití, liderada por su país y respaldada por Estados Unidos, termina su mandato en octubre próximo y pidió al Consejo de Seguridad de la ONU que guíe una “transición responsable y oportuna".
La MSS fue aprobada en 2023 y entró en acción en 2024, para apoyar a la Policía Nacional de Haití, y en la actualidad está conformada por unos 1.000 efectivos, la mayoría de ellos kenianos.
Sin embargo, según datos de la ONU, Haití registró un aumento del 24 % en los homicidios intencionados durante los primeros seis meses del año, alcanzando un total de 4.026 asesinatos.
Además, la violencia ha provocado el desplazamiento interno de más de 1,3 millones de personas.
La nueva misión propuesta por Estados Unidos estaría compuesta por 5.500 efectivos y estaría facultada para enfrentar por la fuerza a las pandillas.