La Haya.- Los delitos relacionados con el narcotráfico le cuestan a la sociedad neerlandesa hasta 4,100 millones de euros cada año en gastos para el sistema penal y los costes médicos, sociales y económicos, un problema que ha convertido a Países Bajos en la región ideal para el tráfico internacional de drogas y obliga a su gobierno a movilizarse.
Los costes sociales del narcotráfico se sitúan entre 3,200 y 4,100 millones de euros anuales, según un informe enviado esta semana por el ministro neerlandés de Justicia, Ferd Grapperhaus, al Parlamento
Presupuesto policial
La policía gasta entre 1,100 y 1,600 millones de euros al año en combatir las drogas, lo que supone de 170 a 270 millones de euros anuales de costes para la administración de la Justicia en Países Bajos.
El servicio de instituciones penitenciarias gasta de 400 a 700 millones de euros en delitos del narcotráfico.
El aspecto sanitario también es relevante, ya que la adicción le cuesta al país 250 millones de euros cada año, mientras que los costes sociales incluyen los 320 millones de euros en prestaciones por desempleo a parados relacionados con las drogas (un 5 % del total de prestaciones), y 200 millones de euros en casos de seguro de discapacidad.
Tráfico y fraude
— Circulación
La economía nacional también se ve afectada por el narcotráfico. Se estima que circulan cada año 16,000 millones de euros en dinero negro en Países Bajos, la mayoría relacionados con el tráfico de drogas y fraude.