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Economía y la geopolítica en el siglo XXI

Daris Javier Cuevas es economista y académico.
📷 Daris Javier Cuevas es economista y académico.

A escala planetaria existe el conceso de que la globalización se ha convertido en la vía mediante el cual se han abierto todas las puertas a la discusión y el debate contemporáneo sobre la reestructuración económica, la reforma del Estado, la recomposición de las equidades, la transformación de los valores, los referentes culturales y simbólicos y la reconstrucción de las ideologías.

Esto tiene su explicación en que el concepto globalización tiene relación directa con la transformación de los procesos económicos y las relaciones sociales.

Se trata de que las profundas transformaciones en las relaciones sociales que se han venido presentando en las últimas décadas y que vienen redefiniendo todas las dimensiones de la materialidad socio histórico y que las escalas geográficas de reescalamiento que se presenta de las relaciones sociales es múltiple.

Esto implica que el actual proceso de globalización, no conlleva a una absoluta territorialización de las sociedades a escala global, tampoco a una completa desterritorialización en el flujo de un espacio supraterritorial, sin distancias ni fronteras, sino más bien conduce a una reestructuración multi-escalar de la organización territorial de la financiación y el poder político y económico proveniente de las grandes economías del mundo.

Desde una perspectiva geopolítica, que incide sobre los espacios económicos regionales, o geoeconomía, es mucho más inteligente interpretar que la inversión internacional domina la internacionalización más de lo que lo hacen los intercambios, por tanto, da forma a las estructuras que predominan en la producción y el intercambio de bienes y de servicios en sus diferentes vertientes.

Pero resulta que los flujos de intercambios entre las empresas globales han adquirido cada vez más importancia, razón por la cual la inversión internacional está respaldada por la globalización de las instituciones bancarias y financieras cuya consecuencia radica en facilitar las fusiones y las adquisiciones transnacionales, en el contexto geopolítico y geoeconómico en que se han venido produciendo.

Es bajo esos argumentos que desde el punto de vista geopolítico se puede interpretar la globalización como una tendencia profunda del desarrollo económico, tecnológico y cultural en la sociedad contemporánea que opera en forma de redes de intercambios y flujos materiales y no-materiales sobre determinados espacios geo-económicos.

En tal virtud, desde esta perspectiva, la globalización se incrusta en el sistema económico universal a través de redes que operan sobre ciertos espacios geo-económicos, es decir, territorios jerarquizados y estructurados en función de los recursos económicos, financieros y tecnológicos de que disponen.

En esa perspectiva, las relaciones económicas globalizadas operan cimentadas en una configuración territorializada de recursos tecnológicos, informáticos, financieros, humanos, sobre una compleja red de redes y líneas comunicacionales, de transporte, informacionales y navegación.

Pero resulta que este fenómeno tiene como función primordial, operar los intercambios y materializar las relaciones de poder, configurándose así una complicada armadura a escala de ciertos intercambios económico e instalado en territorios que están definiendo los esquemas geopolíticos inducidos por los intereses económicos, corporativos y Estatales, para facilitar los intercambios.

Entre los grandes desafíos geopolíticos del siglo XXI pueden mencionarse el terrorismo, las nuevas expresiones de guerra, el calentamiento global, los Estados fallidos, el control del espacio ultraterrestre, las ciberguerras, la ciberseguridad, el hambre y la pobreza.

En el marco de la geopolítica del siglo XXI, lo que se observa es la construcción de una frontera imperial fruto de las promisorias expectativas con relaciones estructuralmente consolidadas a mediano y largo plazo, donde cada cual reclama mayor incidencia en las decisiones del poder político y económico global.

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Daris Javier Cuevas

Economista-Abogado Máster y Doctorado en economía Catedrático de la UASD

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