SANTO DOMINGO.-La tecnología se ha convertido en la gran aliada de la medicina, las innovaciones funcionan para darle mayor calidad a la ciencia en cualquier campo como herramienta de automatización y descubrimiento.

Una técnica que tiene una importante función en la evaluación y seguimiento de pacientes con enfermedades cerebrovasculares es el Doppler transcraneal (DTC), que permite el monitoreo en la fase aguda y de apoyo para el diagnóstico de la muerte encefálica, o en los que no puede realizar la exploración neurológica completa.

Los doctores Cecilia Pérez Minyety y Alexander Altman, del Instituto Nacional de Coordinación de Trasplante (Incort), explicaron que este procedimiento de ondas de ultrasonido permite la exploración de los vasos intracraneales, no invasiva, repetible, de relativo bajo costo y que puede realizarse al lado de la cama del paciente.

No es invasivo

Ambos galenos destacaron que el procedimiento utilizado para el proceso de la donación es portátil, no invasivo, de muy fácil disponibilidad y por tanto es una herramienta imprescindible para optimizar la obtención de órganos para trasplante.

La doctora Cecilia Pérez Minyety describe que la practicidad de tener un aparato que permita hacer diagnósticos al lado de la cama del paciente, sin trasladarlo, es algo muy ventajoso, ya que permite tomar decisiones terapéuticas sin mover al enfermo.

“No requiere preparación previa, no es un invasivo, es indoloroso, este procedimiento es de menor costo que la mayoría de los métodos de toma de imágenes, no utiliza radiación y se puede realizar en la cama del paciente sin necesidad de traslado”, explicó Pérez Minyety.

Traumas craneales

El doctor Alexander Altman dijo que este tipo de tecnología será de utilidad fundamental en las unidades de cuidados intensivos y hospitales de trauma.

Los galenos precisaron también que se utiliza para diagnosticar los traumas craneales y cualquier enfermedad con inflamación o aumento de presión en la cabeza.
Además de poder realizar el seguimiento de los pacientes que son potenciales donantes y el diagnóstico de muerte cerebral.
Al hablar del costo, a nivel privado este estudio cuesta entre RD$8,000 a RD$10,000.