
OpenAI subrayó la capacidad de ChatGPT para crear valor económico para los usuarios tanto a nivel personal como profesional, aunque prima su uso para tareas personales cotidianas, con conversaciones centradas en orientación práctica, búsqueda de información y escritura.
Desde el lanzamiento de ChatGPT hace tres años, el 'chatbot' ha ido ganando cada vez más peso en el día a día de los usuarios, que han aumentando progresivamente su adopción, extendiéndose “más allá de los primeros usuarios” y reduciendo la brecha de género inicial.
Todo ello, con un uso que ha ido evolucionando para generar valor económico, tanto a nivel personal como profesional.
Así se desprende del estudio publicado por la compañía dirigida por Sam Altman sobre cómo utiliza la gente ChatGPT, que es el “más grande hasta la fecha” y que permite ver cómo esta tecnología “ampliamente democratizada” crea valor “a través de una mayor productividad”, tal y como ha detallado la compañía en un comunicado en su blog.
Creado por la Oficina Nacional de Investigación Económica (NBER), el equipo de Investigación Económica de OpenAI y el economista de la Universidad Harvard, David Deming, este estudio engloba un análisis a gran escala de 1.5 millones de conversaciones de usuarios.