Washington.-La hora de la revisión médica ha llegado para Donald Trump, de 71 años y el hombre de mayor edad que accede a la presidencia estadounidense, que tiene cita a finales de esta semana en un hospital militar de los alrededores de Washington.
Pero tanto sus detractores, que se interrogan abiertamente sobre su salud mental, como sus incondicionales, que denuncian viles ataques contra el presidente, quedarán decepcionados: el balance se limitará a verificar su peso, la tensión arterial y los niveles de colesterol.
No hay ningún examen psiquiátrico previsto para quien se califica a sí mismo de “genio estable”.