Dolor y dificultad para mover la mandíbula pueden ser señales de alteraciones DATM

La articulación temporomandibular (ATM) es una articulación sinovial ubicada anatómicamente en la fosa craneal media derecha e izquierda (por adelante de ambas orejas).
Está compuesta principalmente por tejido óseo, muscular y ligamentos que cumplen importantes movimientos biomecánicos al realizar apertura, cierre, protrusión, retrusión y lateralización de la mandíbula, por ello, se clasifica como articulación ginglimoartrodial.
Carlos José Contreras, cirujano oral y maxilofacial de los Centros de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemedicina (Cedimat), explica que el término “disfunción articulación temporomandibular (DATM)” se utiliza generalmente para abarcar alteraciones que pueden variar desde trastornos musculares a articulares (incluyendo hipomovilidad o hipermovilidad de la articulación) a enfermedades de las articulaciones (incluyendo osteoartritis), produciendo alteraciones estructurales, funcionales o fisiológicas del sistema masticatorio, presentando sintomatología dolorosa variable.
El experto señala que los síntomas van desde no presentar dolor, hasta dolor severo de alto impacto, pudiendo estar asociados o no a otras condiciones médicas, por lo que su diagnóstico y tratamiento debe siempre realizarse de manera multidisciplinaria entre especialistas certificados y entrenados en el tratamiento.
Es importante entender que no hay articulación más compleja y utilizada en el cuerpo humano que la ATM.
