La presidenta brasileña Dilma Rousseff pasó una segunda evaluación desde que asumió el poder del gigante sudamericano, en enero de este año.
En marzo, el 73% de los entrevistados aprobaron el modo de Gobierno de Dilma.
Ahora, la actuación de la jefa de Estado ha sido aprobada por 70,2% de los entrevistados, mientras Lula, en su primer mandato en 2003, recibió la aprobación de 76,7%.
En marzo, el 56% evaluaba el Gobierno como óptimo o bueno.
En julio, el índice decayó a 49,2 por ciento.