Juana Méndez, Haití.-Las aguas parecen haber empezado a bajar de nivel luego de que ayer las comisiones ministeriales de República Dominicana y Haití tuvieran una intensa ronda de diálogo en la que sin lugar a dudas predominó el tema migratorio, los alcances de la sentencia del Tribunal Constitucional que define los criterios para la nacionalidad dominicana y el comercio fronterizo.
Las conversaciones empezaron con saludos distendidos entre los comisionados, aunque con algo de tensión en los alrededores de las instalaciones de una empresa de capital dominicano que ha creado más de siete mil empleos en esta fronteriza comunidad haitiana.
La extensa delegación de los haitianos no dejó de sorprender a los dominicanos que asistieron a darle cobertura al evento, aunque quizás ya la delegación dominicana estuviera enterada.
Invitados por Haití estaban el expresidente panameño Martín Torrijo, quien tiene fuertes vínculos con República Dominicana, en especial con el presidente del Partido Revolucionario Dominicano, Miguel Vargas Maldonado, quien en todo momento se ha mostrado favorable a la controversial sentencia del Tribunal Constitucional.
También estaba Eduardo Gamarra, alto ejecutivo de la empresa NewLink, y quien ha dado muchos servicios de consultoría al expresidente dominicano Leonel Fernández.
La delegación dominicana llegó con una hora y treinta minutos de atraso al encuentro.
El primer ministro de Haití, Laurent Lamothe, encabezaba la delegación de su país y lucía relajado, con una chacabana verde. Mientras que Gustavo Montalvo, el ministro de la Presidencia de República Dominicana que encabezaba la contraparte, vestía camisa azul con un saco, pero sin corbata, aunque siempre mantuvo su cara adusta.
En ese primer encuentro, la comisión dominicana estuvo representada por José Ramón Fadul y José del Castillo, ministros de Interior y Policía y de Industria y Comercio, respectivamente; José Manuel Trullols, vicecanciller y canciller en funciones, y César Pina Toribio, consultor jurídico del Poder Ejecutivo.
Por el gobierno haitiano estuvieron Pierre Richard Casimir, ministro de Relaciones Exteriores; Wilson Laleau, ministro de Comercio; David Bazile, ministro de Interior, y Nesmy Manigat, director Regional de AID et Action.
Como observadores participaron, por la Unión UE, Marion Caivano; por Naciones Unidas (ONU), Peter De Clerq, y por el Caricom, Coli Granderson. También la viceministra de Relaciones Exteriores para Latinoamérica y el Caribe, de Venezuela, Verónica Guerrero.
El Plan de Regularización será un pilar
El Gobierno de Haití reconoció el derecho soberano que tiene República Dominicana de establecer su política migratoria y las reglas para otorgar la nacionalidad, mientras que el Gobierno dominicano se comprometió a tomar las medidas necesarias para que se salvaguarden los derechos básicos de las personas de origen haitiano que residen en territorio nacional.
La parte dominicana reiteró el anunció que había hecho hace varias semanas de que avanzará en una legislación adicional para dar respuesta a los casos que no estén contemplados en el Plan Nacional de Regularización.
En tanto que el gobierno haitiano se compromete a expedir pasaportes a los haitianos que apliquen al Plan de Regularización para que puedan completar el procedimiento.