¿Día de los ayuntamientos o de las ciudades?

¿Día de los ayuntamientos o de las ciudades?

¿Día de los ayuntamientos o de las ciudades?

Víctor Féliz

*Por Víctor Féliz

Desde muy jovencito siempre escuché decir en la iglesia en la que me formé que “iglesias somos todos” que el templo es para congregarse, y me remataban con la expresión bíblica “donde estén reunidos dos o tres en mi nombre, yo estoy en medio de ellos”. Sin ánimos de ser insolente o irreverente, pues hasta comparar a veces ofende, me gustaría hacer saber que “ciudad” somos todos y el “ayuntamiento” unos pocos.

El pasado 24 de abril se conmemoró, como todos los años, el día de los ayuntamientos y ahí es la cuestión que nos llama la atención. ¿Por qué de los ayuntamientos y no de las ciudades? ¿Acaso los alcaldes, regidores y ediles no forman parte de ella? Debemos dejar en el pasado el culto a las instituciones o figuras que, si bien tuvieron su razón de ser, hoy ya la colectividad y participación social/comunitaria es el epicentro de los movimientos telúricos políticos y de gobernanza.

Mas que celebrar ese día en donde por lo regular rinden cuentas sobre el ejercicio de un período de un año, lo que deberíamos hacer los ciudadanos es recibir informaciones precisas de lo que hacen los ediles con el poder delegado que manejan.

Ese poder que ostentan va más allá del manejo de recursos económicos, pues manejan informaciones, planes a corto plazo, proyectos de obras, recursos humanos, etc. imagínese usted que la alcaldesa nos diga cómo se mueve el tránsito en la ciudad, cuantos ciudadanos con algún tipo de incapacidad tenemos, cuantos usan bicicletas, áreas verdes, parqueos públicos, como va el dinamismo económico, la construcción de rascacielos. Cuantos restaurantes abrieron o cerraron, cuantos metros de espacios públicos rescatamos. Y lo más importante: cual es el nivel de participación social tienen las decisiones que ellos tomaron en la ciudad.

Aprovechemos esta fecha para que elevemos nuestras voces de manera que en estos espacios de poder, como son los ayuntamientos, se construyan planes para el desarrollo local, que se sigan convirtiendo en herramientas que procuren el bienestar de los territorios, que su misión sea alcanzar el pleno desarrollo sostenible en armonía con el medioambiente, espacios y ciudades amigables e inclusivas; y que sus funcionarios y empleados comprendan que su verdadera y única misión es entregar lo mejor de si a la ciudad, municipio o distrito para el cual laboran con sensibilidad, responsabilidad, humanidad, humildad, orgullo y firmeza en el cumplimiento de las leyes y ordenanzas. Que los alcaldes y alcaldesas comprendan que son autoridades con poder delegado del pueblo y que deber ejercerlo para el pueblo, por el pueblo y con el pueblo.

¡Enhorabuena ciudades y ayuntamientos!