Muy desacreditado, Carlos Morales Languasco tuvo que ceder el gobierno al vice-presidente Ramón-Mon-Cáceres, quien tomó posesión como presidente de la República en diciembre de 1905.
El presidente Mon Cáceres tuvo que ocuparse rápidamente de la deuda interna y externa, que ya ascendía a 40 millones de dólares, acorde a un “estudio” realizado por un agente financiero enviado por el presidente estadounidense Theodore Roosevelt. Era evidente que el monto de la deuda establecido era una exageración y el propio agente extranjero reconoció que carecía de legitimidad, y que en tal sentido, podía ser reducida a más de la mitad.
Los gobiernos de Cáceres y Roosevelt se acogieron a un plan de ajuste sugerido por el agente financiero de Estados Unidos, con lo cual se redujo la deuda a 17 millones de dólares.
El gobierno de Estados Unidos estaba interesado en sacar del juego a los acreedores europeos, con tal de quedarse como el actor hegemónico sobre las finanzas dominicanas, lo cual constituía de hecho un protectorado administrativo y financiero.
Esos eventos ocurrían en un momento en que Estados Unidos controlaba el Canal de Panamá y tenía interés estratégico en mantener bajo su dominio la región del Caribe. Por tal motivo, el gobierno de Roosevelt estaba interesado en que el país se endeudara cada vez más, lo cual implicaba más dependencia y más control de la República. A tales efectos, el gobierno estadounidense le otorgó a Cáceres un préstamo por 20 millones de dólares en septiembre de 1906, con el objetivo de que cancelara la deuda pendiente de 17 millones, que incluía la deuda con los tenedores de bonos europeos.
Para el pago de los 20 millones de dólares el gobierno de Estados Unidos puso como condición, entre otras, que mantendría el control y administración de las aduanas hasta que se pagara la deuda, y que el gobierno dominicano no podía aumentar su deuda pública sin el consentimiento del presidente de los Estados Unidos. Esas condiciones fueron aprobadas por el Congreso dominicano en lo que se conoce como la Convención D0ominico-Americana de 1907.
Mon Cáceres- fue asesinado en noviembre de 1911, y a partir de ahí el país se vió envuelto en conflictos armados fratricidas, que con la llegada del año 1912 –adquirió el carácter de un desorden generalizado, que provocó que las aduanas fronterizas pasaran a ser controladas por uno de los líderes en pugna, el general Desiderio Arias.
El control de las aduanas fronterizas por Desiderio Arias fue uno de los motivos de que se valió el gobierno de los Estados Unidos para planificar la intervención militar del país.
Valiéndose de la Convención de 1907, el presidente estadounidense William Taft envió al país, a finales de 1912, una “Comisión de Pacificación” que estaba custodiada por 750 marines, y bajo la amenaza de una intervención militar masiva, conminó a los líderes rebeldes acordar la elección del arzobispo Adolfo Nouel como presidente provisional de la República.-
Los líderes de los partidos, en sus intrigas y ambiciones personales, no entendían el peligro que representaban los Estados Unidos contra la soberanía de la nación.