Santo Domingo.-Los constructores o responsables del edificio que se desplomó en la calle Octavio Mejía Ricart, en el ensanche Ozama, trataron de corregir los defectos que a simple vista se pueden observar y que provocaron su derrumbe, de acuerdo al informe preliminar que rindió ayer el Colegio Dominicano de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores.
Además de que la obra era ilegal, el gremio que preside Domingo Taveras Ulloa informó que se registraban filtraciones de agua proveniente de una cisterna sobre un material completamente arcilloso, provocando con ello un asentamiento diferencial mayor que el que la estructura podía soportar, ocasionando un colapso en el edificio.
En rueda de prensa en la que detalló el levantamiento hecho por especialistas del Codia, Tavera Ulloa dijo que comprobaron que en la construcción del inmueble los materiales utilizados son de mala calidad y las uniones entre vigas y columnas están ausentes en los anclajes y solape de poca longitud.
Una vez recibamos el informe acabado lo daremos a conocer a la opinión pública y a los organismos correspondientes los resultados de esta investigación con sus sugerencias y conclusiones, dijo Tavera. Manifestó preocupación por la proliferación de obras ilegales en el país. Instó a la población a asesorarse de un profesional que le garantice su inversión.