A pesar de que las relaciones de pareja son uno de los aspectos más importantes de nuestra vida, no siempre son tan armoniosas como nos gustaría. La rutina, las diferencias de opiniones, los hábitos o ciertos comportamientos pueden ir desgastando el vínculo, que en algún momento creíamos perfecto, y originar una crisis de pareja. Es normal.
Así, aprender a gestionar los conflictos y situaciones problemáticas es fundamental para la salud emocional de la pareja. Saber cómo actuar e intentar que las interacciones positivas ganen a las negativas es clave para que sus miembros sean felices. Al fin y al cabo, una pareja tiene que añadir felicidad a la vida de sus integrantes, nunca restársela. Por ello, a continuación explicaremos algunas señales de alarma que pueden estar indicando el comienzo de una crisis de pareja y algunas claves para combatirla. Profundicemos.
Señales de alarma en una relación de pareja
Mantener una relación de pareja en la que predomina la infelicidad provoca agotamiento físico y mental. El malestar experimentado expone a los miembros de la relación a un estado de estrés prolongado que los vuelve más irascibles, vulnerables y tensos. Ahora bien, ¿cómo sabemos si nos encontramos en una crisis de pareja o lo que nos sucede solo es el anticipo del fin de la relación?
Aunque cada uno de nosotros es, más o menos, capaz de identificar cuándo su relación no está bien, existen ciertas conductas como las quejas y críticas continuas que nos indican que es necesario tomar medidas. Incluso, hay otras como el desprecio y las actitudes defensivas y evasivas que son mucho más evidentes. Por ello, lo recomendable es estar siempre atento a nuestra relación.
Si se soluciona el problema lo antes posible, la relación de pareja será más fácil de encauzar y mantener que si dejamos que el malestar se acumule poro a poco. Esto último solo traerá complicaciones a largo plazo.
Pero, ¿se pueden combatir las crisis de pareja?
En algunas ocasiones, la cuestión no es tanto si se pueden combatir las crisis de pareja, sino el hecho de creer que es posible hacerlo. Por ejemplo, cuando nos encontramos en una dinámica muy negativa, puede que no seamos capaces de encontrar una salida y optemos por poner fin a la relación. Quizás te sientas identificado con algunas de las situaciones siguientes:
- Creemos que los problemas son demasiado graves para encontrar una solución.
- Se considera que hablar ya no sirve de nada, no merece la pena y es una pérdida de tiempo.
- Cada miembro hace su propia vida separada de la otra persona.
- Uno de los miembros o ambos se sienten solos.
- Ha aparecido una tercera persona que pone en peligro la relación.
Estos escenarios son más habituales de lo que pueden parecer. Por ello, si los estás viviendo, recuerda que no tiene por qué haber nada malo contigo ni con tu relación. Lo importante es que ambas personas estéis de acuerdo en luchar por la relación y os encontréis con la ganas, paciencia y disposición para ello. A continuación encontrarás cinco claves para conseguirlo.
“Cuando alguien te muestra quién es de verdad, confía”.
-Maya Angelou-
5 claves para combatir las crisis de pareja
1- Aumentar los momentos buenos
Según algunos estudios, una pareja feliz suele tener unas cinco interacciones positivas por cada negativa. Por ello, si detectas que en tu relación hay más problemas que momentos agradables, vuestra tarea es conseguir invertir esta proporción. Para lograrlo, recuerda que ambos estáis en el mismo barco y que tu pareja no es tu enemigo, sino tu aliado.
Tener una cita agradable, mantener una relación sexual satisfactoria, hacer una escapada… Son muchas las maneras de lograr crear nuevos recuerdos positivos.
2- Hablar y escuchar
Hablar siempre ha sido algo bueno en una pareja. Compartir las preocupaciones de la vida cotidiana es fundamental para que los miembros de una relación se sientan unidos.
Sin embargo, no vale con hacerlo de cualquier manera. Lo importante es escuchar al otro, mostrar interés y centrarnos en lo que nos dice, al igual que él tiene que hacer con nosotros. Se trata de que lleve a cabo un intercambio auténtico y sincero, en el que fluya la conexión emocional.
3- Celebración
Las celebraciones siempre alegran el día. Si notas que tu pareja retoma su camino y vuelve a la senda de la felicidad, ¿por qué no celebrarlo? Os habéis ganado un premio por el esfuerzo realizado. Podéis hacer algo que os ilusione a los dos, como un viaje especial, una cita romántica o simplemente relajaros una noche en compañía el uno del otro.
Decisiones comunes
Un caso claro de separación es que cada miembro de la pareja haga su vida y tome decisiones de forma individual. Por eso, para combatir las crisis de pareja, sería bueno que retoméis el hábito de actuar como un equipo. Esto aumentará la confianza y será más fácil tomar caminos unidos.
“Amar no es mirarse el uno al otro sino más bien mirar ambos en la misma dirección”.
-Antoine de Saint-Exupéry-
Como vemos, solucionar una crisis de pareja requiere esfuerzo y trabajo, pero es posible conseguirlo. Si tanto tú como tu pareja queréis estar juntos, lo acabaréis logrando. Puedes comenzar por aplicar estas claves y, si no es suficiente, quizás podría serte de ayuda acudir a un profesional especializado en estos temas. El caso es que probéis todos los enfoques que sean necesarios para volver a recuperar la pasión y la magia del principio.
Fuente: La mente es maravillosa