PARÍS.- Francia y Estados Unidos reforzaron el miércoles la seguridad de embajadas y escuelas en medio de temores de que las caricaturas de Mahoma publicadas en una revista francesa aticen la violencia que agita al mundo musulmán a causa de una película antiislámica.
Más de 30 personas murieron desde la semana pasada en los ataques y manifestaciones que se desencadenaron por la difusión por internet de extractos de la película «La inocencia de los musulmanes», incluyendo 12 muertos en un atentado suicida perpetrado el martes en Afganistán por una mujer.
Francia tomó «medidas de seguridad especiales» para proteger a sus embajadas, tras la publicación de las caricaturas del Profeta de los musulmanes en el semanario Charlie Hebdo, anunció el ministro de Relaciones Exteriores, Laurent Fabius.
El viernes -día de oración para los mahometanos, a menudo seguida de protestas- Francia cerrará sus sedes diplomáticas y colegios en unos veinte países.
En Túnez, los colegios permanecerán cerrados desde este miércoles hasta el próximo lunes.
El gobernante partido islamista tunecino Ennahda sostuvo que los musulmanes tienen «derecho a protestar» pacíficamente, tras la publicación de las caricaturas.
La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, anunció también medidas especiales para proteger las embajadas de Estados Unidos, blanco principal de la ira provocada por la difusión del filme considerado denigrante sobre Mahoma, producido en ese país.
En Pakistán, el gobierno decretó que el viernes será día festivo nacional en honor al profeta Mahoma, al que consideran agraviado por el polémico filme.
En el este de Afganistán, unas mil personas bloquearon la carretera hacia Kabul al grito de «Muerte a Estados Unidos» y «Muerte a los enemigos del islam».
La revista satírica francesa Charlie Hebdo se sumó con su habitual estilo provocador a la polémica, burlándose tanto de la película como de la intolerancia religiosa con caricaturas que en dos casos muestran al Profeta desnudo.
La primera edición se agotó, y por la tarde el semanario anunció una segunda tirada.
La policía reforzó la seguridad en los alrededores de la redacción de Charlie Hebdo en París, cuyos anteriores locales fueron incendiados en noviembre de 2011 precisamente tras la publicación de un número que se burlaba de la sharia, la ley islámica.