
Santo Domingo.-El Gobierno de Haití está confrontando una drástica caída en sus recaudaciones aduanales luego del conflicto con República Dominicana, lo cual ha obligado a su Administración General de Aduanas a emitir varias disposiciones aumentando las multas y los requisitos burocráticos a sus importadores.
En adición también registra un incremento en su ya elevada inflación por el aumento de precios de productos alimenticios que han dejado de llegarle o que han reducido su flujo por el cierre de la frontera con República Dominicana, primero por disposición del Gobierno dominicano y luego por disposición de las autoridades haitianas.
Los ingresos aduanales de Haití habían aumentado considerablemente en los últimos años gracias a medidas adoptadas junto con el Gobierno dominicano para canalizar el flujo comercial a través de los cuatro principales cruces binacionales, así como el uso de puertos dominicanos para llegadas de mercancías de otros países, las cuales son llevadas a Haití por puntos de control, con lo que se ha reducido el contrabando y la evasión.
El propio ministro de finanzas de Haití, Michel Patrick Boisvert, reveló que anteriormente el comercio fronterizo le representaba ingresos de entre 1,000 millones (US$7.5 millones) y 1,500 millones de gourdes (US$11.5 millones) al año, cifra que al 9 de octubre pasado había aumentado a 3,000 millones de goudes (US$23 millones) en el período fiscal del 2023.
A esa mejora se le suman las recaudaciones de la mercancía que tienen como destino final Haití y que llegan a puertos dominicanos que son trasladadas a puntos de control aduanales haitianos para el cobro de los impuestos.
Sin embargo, esa mejora empezó a caer luego del conflicto con República Dominicana que se inició por la construcción de un canal que el Gobierno dominicano afirma desvía el cause del río Dajabón y que le atribuye a Haití construirlo violando los acuerdos internacionales y sin las consultas de rigor.
