
Santo Domingo, RD. – El escritor Avelino Stanley, designado recientemente como miembro correspondiente de la Academia Dominicana de la Lengua, formalizó su ingreso a dicha institución presentando el discurso reglamentario. La pieza expuesta por Stanley tuvo como título “El origen de la literatura infantil en República Dominicana: un hallazgo”.
Frente a una selecta concurrencia a casa llena el autor de “Tiempo muerto”, obra ganadora del Premio Nacional de Novela en 1996, dijo que su discurso era parte del primer capítulo de una investigación que le llevó cinco años y que culminó con la escritura de una obra titulada “Historia de la literatura infantil y juvenil dominicana”.
Antes de presentar el aspecto central Stanley rebatió las afirmaciones de los investigadores Carmen Bravo-Villasante (española), Miguel Collado (dominicano) y Manuel Peña Muñoz (chileno) quienes habían sostenido por separado que la literatura infantil y juvenil dominicana tenía su origen en 1821 con las fábulas publicadas por José Núñez de Cáceres, padre de la independencia efímera.
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Avelino Stanley sostuvo que la literatura infantil dominicana no puede comenzar en 1821 “debido a que el contenido de las fábulas de Núñez de Cáceres no estaba al alcance de la comprensión de los niños, adolescentes y jóvenes de aquel momento ni de los infantes de ahora”. Stanley basó su argumento en los planteamientos de estudiosos de la fábula como la española María Rosario Ozaeta Gálvez y el argentino Juan Carlos Dido.
Avelino Stanley, quien es el presidente de la Unión de Escritores Dominicanos, afirmó que la profesora Abigaíl Mejía, en su libro “Historia de la literatura dominicana”, del año 1929, señala que la obra “Adela o el ángel del consuelo”, de Francisco Xavier Amiama Urdaneta, publicada en el año 1872, es una novela “para muchachos, una obra infantil”.
Stanley afirmó que es de Abigaíl Mejía el mérito de aseverar que dicha pieza pertenece al campo de la infancia y que el hallazgo de su investigación consiste en señalar que esa novela es el punto de partida de la literatura infantil dominicana.
El nuevo integrante de la Academia Dominicana de la Lengua fue recibido por el miembro de número Rafael Peralta Romero, quien le dio la bienvenida a Stanley, lo felicitó por su discurso y lo instó a colaborar con los proyectos de la institución.