El contrato
—Te amo —dijo. La frase estaba en el libreto y el hombre la repitió tal como la había ensayado, y lo hizo mirando a la mujer con amor dramático, bajo las luces del set graduadas con una intensidad leve. Propia de la escena y su naturaleza romántica. Los dos actores, antes, eran desconocidos entre sí. […]