El asma es una enfermedad crónica que afecta a más de 230 millones de pacientes al nivel mundial y se caracteriza por ataques recurrentes de dificultad respiratoria y sibilancias (sonido silbante durante la respiración), que varían en forma y frecuencia en cada paciente.

Ángela Araújo, neumóloga de los Centros de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemedicina (Cedimat), explica que dichos síntomas se pueden presentar varias veces al día o a la semana y en algunas personas se agravan durante la actividad física o por la noche.

La especialista sostiene que la patología principal del asma radica en la inflamación crónica del revestimiento bronquial, lo que provoca estrechamiento de las vías aéreas y disminución del flujo de aire que entra y sale de los pulmones.

Explica que durante un ataque de asma los músculos alrededor de las vías respiratorias se contraen, causando esto mayor mucosidad, lo cual hace que los conductos respiratorios (bronquios) se estrechen.

Causas
La neumóloga explica que el desarrollo del asma es multifactorial y va a depender de interacciones entre genes y factores medioambientales.

En los factores de riesgo medioambientales la exposición a alérgenos del hogar como son ácaros del polvo, cucarachas, mascotas y otros.

Destaca que estos se van a presentar en el desarrollo del asma en niños mayores y en adultos. Advierte que también están implicadas las dietas con bajo contenido de vitaminas C y E, así como aquellas bajas en ácidos grasos como el Omega 3 y la obesidad.

La doctora continúa diciendo, que también las personas que tuvieron asma en su infancia tienen mayores probabilidades de padecerla en la adultez.

Cita también factores genéticos, aquellos pacientes con padres asmáticos son potenciales candidatos a padecer asma severa en el adulto.

Los síntomas
Al hablar de los síntomas recurrentes, la doctora detalla que podrían causar insomnio, cansancio diurno, disminución de la actividad física y ausentismo laboral.

Aunque tiene una tasa de mortalidad baja, está implicada en la disminución de la calidad de vida de estos pacientes y uso frecuente de los recursos sanitarios.

“Se recomienda a estos pacientes acercarse a un facultativo de la salud respiratoria con los fines de la valoración pulmonar, identificación de factores de riesgos y enfermedades concomitantes que pudiesen estar exacerbando el cuadro asmático y la realización de pruebas complementarias.

En la actualidad contamos con medicamentos que podrían ayudar al paciente asmático, disminuyendo así la carga económica y social que conlleva y dando una mejor calidad de vida”, asevera Araujo.

El tratamiento
La especialista destaca que gracias a la introducción de nuevas opciones terapéuticas, entre ellos los medicamentos inhalados, se ha mejorado drásticamente la calidad de vida de los pacientes asmáticos.

Sin embargo, recalca Araújo, existe un grupo de pacientes, que a pesar del uso adecuado de la medicación no logran el control de esta condición, requiriendo muchas veces hospitalización.

La doctora asevera que la importancia de la identificación de este grupo, que puede representar entre un 5 a 10 % de los pacientes asmáticos radica en el gran consumo de recursos y la pobre calidad de vida que llevan, teniendo la mayor carga sanitaria por asma.

Recuerda que en este grupo de pacientes se debe de valorar enfermedades concomitantes que pudiesen estar implicadas en el pobre control de su enfermedad, entre estas se encuentran la obesidad, el tabaquismo, las enfermedades de vías aéreas superiores como la sinusitis, rinitis y poliposis nasal (formaciones blanquecinas que aparecen en el interior de las fosas nasales).

Se debe valorar, además, el síndrome de apnea del sueño, enfermedades gastrointestinales, como la enfermedad por reflujo gastroesofágico y patologías psiquiátricas como la ansiedad y depresión.

Otras afecciones
Hay otros tipos de enfermedades que habría diferenciar en pacientes que no alcanzan a estar completamente controlados a pesar de una buena medicación, como son la presencia de una insuficiencia cardiaca, obstrucción laríngea y otras enfermedades respiratorias, como son enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), la fibrosis quística, las bronquiectasias, entre otras condiciones.

Araujo explica que factores desencadenantes estarían implicados también en la presentación de asma grave no controlada en los adultos, como son la exposición laboral, la contaminación ambiental, el uso de cigarrillos electrónicos, la inhalación de drogas como marihuana y el uso de medicamentos cardiacos, como los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (IECA) y los beta bloqueantes, además del uso de antiinflamatorios no esteroideos, que son medicamentos usados para tratar el dolor, la inflamación y la fiebre.

“El objetivo de la clínica de Cedimat, es que los pacientes con asma severa tengan acceso a un diagnóstico y tratamiento oportuno para mejoría de las comorbilidades y calidad de vida”, concluye la médica.

Personalizada

— Clínica del Asma
La doctora Araújo destaca que en el Departamento de Neumología de Cedimat se encuentra la clínica del asma en donde un grupo de facultativos se encarga de la atención personalizada e individualizada del paciente.

Identifica si tu asma es severa
¿Cómo identifico que mi asma es severa y de difícil control?, si a pesar de utilizar la medicación prescrita por su médico usted presenta, pobre control de los síntomas asmáticos, dos o más crisis asmáticas moderadas en el último año o una crisis asmática que haya requerido hospitalización en el último año o limitación crónica de la función pulmonar a pesar de un tratamiento asmático adecuado podría estar presentando asma severa no controlada.