Bloomberg News.-Los fabricantes y comerciantes minoristas de vídeojuegos enfrentan una presión cada vez mayor de Washington y de grupos de defensa preocupados por las posibles conexiones entre los juegos violentos y tragedias como la masacre en la escuela de Newtown, Connecticut.
Un proyecto de ley presentado por el senador estadounidense Jay Rockefeller manda que la Academia Nacional de Ciencias analice si los juegos y los programas violentos llevan a los niños a actuar agresivamente, dijo el demócrata de West Virginia en una declaración.
También instará a la Comisión Federal de Comercio y a la Comisión Federal de Comunicaciones a ampliar sus estudios. El grupo de defensa Common Sense Media celebró las medidas.
Recientes fallos judiciales demuestran que todavía hay gente que no lo entiende, dijo Rockefeller.
Creen que los videojuegos violentos no son más peligrosos para las mentes jóvenes que la literatura clásica o los dibujos animados del sábado por la mañana. Los padres, los pediatras y los psicólogos son más sensatos.
Acciones de Activision Activision Blizzard, la empresa más grande de videojuegos, se desplomó por tercer día después de los asesinatos del 14 de diciembre, perdiendo 2,4 por ciento hasta US$10,85 en Nueva York. Esta semana está un 4,9 por ciento más abajo.