Raphy D'Oleo, empresario artístico
Por: Raphy D´ Oleo
El amor y la amistad son hermanos gemelos. Ambos para ser puros dependen de una correspondencia común. En el amor la correspondencia es menos viable que en la amistad, pero los valores son comunes a ambos. El amor no permite compartir el sentimiento; la amistad sí.
El amigo mantiene una relación con trato afectivo, recíproco, leal, solidario, incondicional, sincero y comprometido. El amor se sostiene en una relación gustativa, obligatoriamente comprometida, debe ser sincera, puede ser solidaria, pero necesariamente no es recíproca, ni leal ni incondicional. Por todo ello es mejor un pequeño amigo que un gran amor.
La amistad depende de lo propio, el amor de lo ajeno. El falso amigo te genera confusión, pero lo descubres rápidamente, mientras que la equivocación en el amor puede conducirte a situaciones difíciles que requieren mucho tiempo para ser subsanables.
Paradójicamente la palabra amigo proviene del latín ̈¨amicus ̈ y esta de ¨amare¨, de donde se deriva amar, sin embargo, teniendo el mismo origen, la distancia entre ambas es tan grande que no hay manera de colocarlas en el mismo espacio ni en la misma cama. El amor es para un tiempo; la amistad para toda la vida.
