SANTO DOMINGO.-El tener la mayoría legislativa durante el cuatrienio que casi concluye no fue determinante para que el presidente Luis Abinader lograra la eliminación del fondo de ayuda social que reciben senadores y que se conoce como barrilito.
Ahora, con un control casi absoluto en ambas cámaras legislativas, el mandatario deberá emplearse a fondo para convencer a sus legisladores de abstenerse de recibir los recursos que, desde el año 2016, son distribuidos dependiendo de la cantidad de habitantes por provincias.
Entonces se argumentó que el fin era transparentar los recursos que recibían senadores y diputados para ayudas.
En el presupuesto del Senado para este año 2024 fueron destinados 400 millones de pesos para ayudas ocasionales y programadas y otros dos millones de pesos para un programa de becas.
La crítica de organizaciones de la sociedad civil a la práctica se sustenta en que la Constitución no prevé para los congresistas la función de brindar asistencia social, limitándolos a fiscalizar, legislar y representar.
Lo que dicen los senadores que reciben la ayuda es que tienen que lidiar con situaciones muy particulares y de emergencia en sus respectivas provincias, donde no llegan a tiempo las ayudas que canaliza el Gobierno Central.
La distribución
En los últimos cuatro años los senadores de Santo Domingo, el Distrito Nacional y Santiago optaron por no recibir los recursos.
Sus colegas alegaron que la dinámica en las provincias con mejores niveles de desarrollo es distinta al resto del país.
Fuera de estas tres, la provincia de San Cristóbal recibió a partir del 2021 RD$1 millón, 59 mil pesos, siendo este el monto más alto.
Era seguida por La Vega con RD$944,000; Puerto Plata (RD$869,000); Duarte (RD$849,000) y Espaillat con RD$784, 000.
Las de menor ingreso son las provincias fronterizas, así como El Seibo, con promedios mensuales de RD$619,000.
Posición firme
En una entrevista concedida a EL DÍA cuando solo era un aspirante presidencial del PRM, Luis Abinader se mostró contrario a que desde el Congreso se destinaran recursos para ayudas sociales.
Consideró en ese momento una decisión de la presidencia de la Cámara de Diputados de transferir los fondos de gestión social de ese organismo a los hospitales públicos, pero abogó porque la medida sea extendida a los recursos que manejan senadores.
Puntos de vista
—1— En contra
Organizaciones de la sociedad civil consideran que esta práctica es parte del clientelismo político.
—2— A favor
Siempre legisladores de turno, y hasta aspirantes, por entender que soluciona problemas inmediatos.
—3— Decisión
El poder recae en los mismos senadores.
Todos los partidos se han mostrado a favor
Coincidencia. Representantes de todos los partidos con presencia en el Congreso han participado de la entrega de recursos para las ayudas indistintamente de la mayoría que controle las cámaras legislativas.
Uno de los argumentos para eliminar la costumbre durante la pandemia, fue destinar dichos recursos para tratar la enfermedad viral.
El senador electo del Distrito Nacional, Omar Fernández, dijo que, aunque la práctica estaba distorsionada, al estar instituida, podría usarse para entregar becas a estudiantes.