Ferreiras revela Hiraldo tenía a su cargo vigilar actividades de Rossó

Ferreiras revela Hiraldo tenía a su cargo vigilar actividades de Rossó

Ferreiras revela Hiraldo tenía a su cargo vigilar actividades de Rossó

Santo Domingo.-El mayor general (r) Radhamés Ramírez Ferreira, quien fuera jefe de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) de 2006 a 2008, manifestó que el saneamiento de las Fuerzas Armadas y la Dirección Nacional de Control de Drogas se dificultaba debido al control sobre las decisiones militares que ejercía el Cuerpo de Ayudantes Militares durante los últimos años de la administración de Leonel Fernández.

Afirmó que esa situación hizo que las Fuerzas Armadas se “más que cualquierizaran”.

Aunque enfatizó que el entonces presidente Fernández le brindó su apoyo, a sus espaldas se tomaban muchas decisiones, incluyendo algunas para proteger a militares con comportamientos inadecuados o sospechosos.

“Ese cuerpo desacreditado, corrupto e inmoral que es el Cuerpo de Ayudantes, donde el factótum que estaba ahí en los últimos años manipulaba las Fuerzas Armadas, ponía a su antojo a cada comandante, mandando gente para todas partes”, manifestó.

Belisario Medina

Mientras Ramírez Ferreira se desempeñó como jefe de la DNCD, al frente del Cuerpo de Ayudantes Militares estaba el mayor general Belisario Medina y Medina. 

La Real Academia de la Lengua Española define la palabra factótum como “persona de plena confianza de otra y que en nombre de esta despacha sus principales negocios; Persona que desempeña en una casa o dependencia todos los menesteres y Persona entremetida, que oficiosamente se presta a todo género de servicios.

Hiraldo Guerrero

Al ser preguntado sobre el caso de Francisco Hiraldo Guerrero, quien fuera jefe de operaciones de la DNCD durante su mandato, Ramírez Ferreiras dijo estar sorprendido, porque éste no dio muestras de estar en contubernio con el narcotráfico.

“Estoy sorprendido y dolido, porque la parte que conozco de él es para que a una persona con concepto le duela saber que cayó en esa desgracia, que se metió en eso”, manifestó Ramírez Ferreira.

Reveló que Hiraldo Guerrero era de los que le daban seguimiento al exteniente de navío (capitán) Carlos Rossó Peña, porque ya en ese momento había indicios de sus vínculos con el narcotráfico.

Explicó que Rossó y el capitán de corbeta (mayor) Miguel Suárez Silfa, ambos extraditados a Puerto Rico por narcotráfico, recibían protección en estamentos militares, por lo que tuvo que pedir a la DEA que enviara la documentación sobre la acusación para así facilitar su separación de la Marina de Guerra.

Ramírez Ferreira fue entrevistado en el programa Cuentas Claras que se transmite a las 7:00 de la mañana por la emisora 95.7 FM (La Nota).

“Nosotros le dimos seguimiento e Hiraldo Guerrero participó en eso. Teníamos pruebas de   Rossó y el otro (Suárez Silfa). Intenté cancelar a esa gente y no pude. El papá de Rossó (un contralmirante de la Marina) visitó la seca y la Meca reportándome, diciendo que yo estaba atosigando a su hijo”, narró.

Quirino y Rossó Peña

Justamente la solicitud de extradición  contra Hiraldo Guerrero se basa en declaraciones ofrecidas por Quirino Ernesto Paulino Castillo, extraditado en febrero de 2005 (arrestado el 18 de diciembre de 2004), y Rossó Peña, extraditado en 2009, quienes acusan al exjefe de operaciones de la DNCD de brindar protección a cargamentos de cocaína en los que ellos mismos estaban involucrados.

La acusación

La Fiscalía del Distrito Sur de New York afirma que Rossó Peña lo involucra en la protección de al menos 25 cargamentos de cocaína, por los cuales cobraba en promedio 100 mil dólares por cada uno.

El exjefe de la DNCD explicó que en las Fuerzas Armadas uno de sus miembros puede ser cancelado aunque no haya un proceso judicial abierto, porque los reglamentos permiten esa posibilidad. Sin embargo, afirmó, en el caso de Rossó Peña debió presionar a la DEA para que le mandaran documentación y es después de eso que pudo lograr su cancelación.

Dijo haber recibido grandes presiones por parte de quien en ese momento dirigía el Cuerpo de Ayudantes Militares, a quien nunca llamó por su nombre.

“Lo que estaba pasando en la DNCD era como consecuencia de que ese factótum que estaba ahí (en el Cuerpo de Ayudantes Militares) quería ordenar y mandar gente para él hacer lo que le viniera en ganas”, puntualizó.

Carta de renuncia

Reveló que ante esa situación redactó su carta de renuncia, pero que dos personas le impidieron entregarla, señalando que eso sería un gran escándalo del cual Leonel Fernández no era merecedor.

Informó que de esas dos personas una era Miguel Cocco, ya fallecido, y que la otra aún vive.

“Yo me considero ser amigo de Leonel Fernández. Pero una cosa es Leonel Fernández como presidente y otra cosa es el anillo perverso a su alrededor”, puntualizó.

Dijo que esa hegemonía del Cuerpo de Ayudantes Militares sobre las Fuerzas Armadas provocó la debacle institucional . “Daba vergüenza”, enfatizó .

Elogia a Rosado Mateo y a Hugo Chávez

El exmayor general Ramírez Ferreira manifestó que el trabajo que actualmente se realiza en la Dirección Nacional de Control de Drogas, bajo la dirección del mayor general Rolando Rosado Mateo, sacará  muchas  cosas a colación.

Dijo que cuando él llegó a esa posición en 2006, ahí había una “pocilga en todo el sentido de la palabra” y que inició el proceso de saneamiento llegando a retirar más de tres mil agentes por comportamiento inadecuado.

También afirmó que los aviones Súper Tucano  han aportado poco a la reducción de los vuelos ilegales como se ha afirmado.

A su entender eso ha sido posible porque Venezuela compró a China y Rusia aviones, helicópteros y radares que le han permitido cerrar sus cielos. Señaló que el problema estuvo porque a Chávez no le vendían repuestos para sus aviones.



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