Yadier Molina hace un gesto de su mano derecha, la misma con la que enfría a los osados que se atreven a robarle, y desestima ser el Dios del equipo de Puerto Rico que se mantiene invicto en el Clásico Mundial de Béisbol 2017.
La actuación de Molina ha sido tan espectacular que la prensa de su país lo calificó de “El Dios del triunfo”.
“Lo que sí puedo decir es que estoy muy agradecido a Dios por tener este tipo de juego, y el crédito que le doy a mis compañeros”, dijo Molina.
“Molina es un gran profesional, y uno de los mejores receptores del béisbol de hoy”, dijo Tony Peña, manager dominicano.